Potosí en alerta con dinamitazos y repique de campañas
La madrugada del sábado la población potosina vivió momentos de zozobra porque el servicio de energía eléctrica fue cortado durante más de una hora por un supuesto ataque de campesinos del norte del departamento que amenazaron con cercar la ciudad si el Comité Cívico Potosinista (Comcipo) y el Gobierno no solucionan el conflicto que se tornó en el más largo de su historia con 21 días de paro cívico.
Testimonios de ciudadanos desde la Villa Imperial que se contactaron con EL DIARIO dan cuenta que entre la medianoche y las dos de la madrugada de ayer hubo amagues de enfrentamientos.
Los ayllus del Norte Potosí anunciaron durante la pasada semana que cercarían la ciudad de Potosí, si la dirigencia de Comcipo no aceptaba el diálogo planteado con el Gobierno. Manifestaron que las medidas fueron determinadas por la situación “crítica” por la que atraviesa Potosí, cerca de cumplir un mes de paro indefinido.
Cerca de la medianoche, grupos de vecinos afines al Comité Cívico se movilizaron y reforzaron los puntos de bloqueo de la ciudad en Potosí. Mineros que acompañan la medida detonaron cachorros de dinamita para evitar la intervención.
La población encendió fogatas y las iglesias repicaron las campanas, en señal de alerta, luego de evidenciarse la presencia de grupos de campesinos que presuntamente buscarían romper el paro.
Según el dirigente William Estrada, campesinos del municipio de Tinkipaya intentaron desbloquear la región de San Antonio pero los vecinos mantuvieron la medida.
El viernes 10 mil campesinos fueron movilizados para romper el paro cívico potosino que se desarrolla desde el 6 de julio.
MÁS ADVERTENCIAS
Los ayllus del Norte Potosí no fueron los únicos en enviar advertencias a Comcipo. Los dirigentes de la Coordinadora Nacional por el Cambio (Conalcam), que aglutina a organizaciones sociales del país, afines al Movimiento Al Socialismo (MAS) dieron el jueves un plazo de 48 horas para que los cívicos levanten sus medidas de presión inicien el diálogo con autoridades de Estado y abandonen La Paz, retornando a sus regiones.
“Damos un plazo de 48 horas para que todos los compañeros que están en movilización deben replegarse a sus comunidades y reflexionar de manera profunda para reanudar el diálogo, un diálogo sincero para llegar al pueblo sin ninguna medida de presión”, enfatizó en conferencia de prensa, el ejecutivo de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (Csutcb), Feliciano Vegamonte.
Agregó que si Comcipo no cumple con lo dispuesto, Conalcam asumirá medidas, aunque no las precisó.
Entretanto, la Federación de Juntas Vecinales (Fejuve) de La Paz, a la cabeza de Marcos Quispe advirtió que defenderá la ciudad maravilla. Dio un plazo de 48 horas a la dirigencia de los cívicos para que inicien el diálogo con el Gobierno.
“Damos un plazo de 48 horas a los dirigentes de Comcipo para acceder al diálogo con los personeros del Gobierno central para superar las dificultades existentes, porque sólo el diálogo puede permitir superar las diferencias que están siendo planteadas en el momento. De no ser escuchadas las juntas vecinales y otras organizaciones saldremos a las calles para defender nuestra ciudad maravilla y evitar su destrozo”, señaló el dirigente.
La amenaza que públicamente lanzaron algunos dirigentes de organizaciones sociales, afines al partido de Gobierno, generó una reacción de mucha tensión y “organización interna” para la resistencia en Potosí, según cuenta en Facebook de Comcipo.
El presidente Evo Morales, por su parte, se refirió al conflicto de los potosinos el viernes en Cobija, Pando.
“Siempre hay pequeños grupos que molestan permanentemente y tal vez mañana o pasado mañana explicaremos por qué una acción política, creando sentimiento de una ciudad, engañando a su pueblo, y no es por primera vez siempre que hicieron eso”, expresó.
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