Periodista Paco retorna a Potosí

Juan Carlos Paco Veramendi y otros tres miembros del Comité Cívico Potosinista (Comcipo), detenidos el paso 22 de julio, en los disturbios de las inmediaciones del Ministerio de Gobierno, fueron puestos en libertad ayer a eso de las 13.00 y retornarán a la capital de la Villa Imperial para asumir su defensa, informó la jurista Jimena Nina.

A pesar de que existen varios puntos de bloqueo en esa ciudad, Fabián Choque Uño, Agustín Mendoza Mamani y Jorge Kopaico Colque, miembros de Comcipo, junto al periodista, delegado por la Federación de Trabajadores de la Prensa de Potosí, Juan Carlos Paco, retornaron ayer a la Villa Imperial, luego de beneficiarse con medidas sustitutivas.

Casi dos días tuvieron que transcurrir para que la determinación de la juez Cardozo sea cumplida debido a la complejidad de los trámites que debía hacerse con Régimen Penitenciario y las instancias judiciales.

Los cuatro ciudadanos potosinos, imputados por causar estragos y violencia en la movilización del miércoles pasado, salieron del penal de San Pedro en medio de la expectativa de sus compañeros y medios de comunicación.

Desde el inicio del proceso, el equipo de juristas observó la aprehensión y los cargos de flagrancia, basados en una supuesta acción directa, pues el Ministerio Público nunca presentó elementos de convicción y sólo apelaron a fotografías y videos tomados por medios de comunicación, en los que no figura ninguno de los imputados, según la jurista Nina.

La mañana de ayer, los cuatro ciudadanos, enmanillados, fueron llevados desde celdas judiciales al penal de San Pedro, donde fueron fotografiados y registrados para luego dejarlos en libertad.

Una vez fuera, el periodista Paco no pudo contener el llanto y dirigiéndose a sus compañeros declaro: “A Potosí, le digo que estamos conscientes de que necesita atención, nuestra tierra necesita desarrollo y muchísimo apoyo de parte del Estado central”.

Más tranquilo luego contó a Erbol lo que ocurrió esa tarde cuando fue aprehendido por efectivos policiales: “Le di (la credencial), me la quitó y prácticamente me la hizo desaparecer. Después vino otro policía y me pidió mi carnet de identidad y vio que mi lugar de nacimiento decía ‘Potosí’, entonces quiso detenerme y yo me resistí. En el forcejeo el policía que tenía mi carnet desapareció. Es decir, me detuvieron cuando sacaba fotos a la golpiza que recibía un minero”, agregó. Su grabadora y su cámara fotográfica también fueron confiscadas por la Policía, objetos que el periodista aún no recuperó.

La abogada Jimena Nina lamentó la tardanza y dilación para liberar a sus defendidos, aclarando que una vez cumplida la decisión judicial los cuatro están arraigados y deberán presentarse en la Fiscalía de Potosí cada lunes a firmar el libro de asistencia.