Oposición cree que habrá “voto castigo’’

(ANF).- La frustración del movimiento cívico de Potosí, que abandonó la sede de Gobierno con las manos vacías se convertirá en un “voto castigo” en el referendo en el que se consultará a los ciudadanos su opinión en torno al Estatuto Autonómico el próximo 20 de septiembre, afirmó el diputado de Unidad Demócrata (UD), Gonzalo Barrientos. Por su parte, el oficialista al Movimiento Al Socialismo (MAS) reconoce que sufrirá un “efecto negativo” en la región.

El Comité Cívico de Potosí retornó a su región después de 24 días de movilizaciones con el espíritu victorioso, aunque sin respuestas concretas al pliego de 26 demandas regionales. El Gobierno aprobó las actas de las seis comisiones de trabajo sin haber hecho ninguna concesión importante.

Por este hecho, el diputado Barrientos cree que la ciudad de Potosí se “siente maltratada, engañada y discriminada” por las maniobras políticas del Gobierno que desde el inicio de las movilizaciones trabajó para desprestigiar a la organización cívica.

“La bronca contenida que existe se va a manifestar en el voto castigo y será una legítima manifestación ciudadana, ante la injusticia y el maltrato del Gobierno con esta región”, declaró el diputado opositor.

El 20 de septiembre, en Potosí se llevará a cabo el referéndum de aprobación del estatuto autonómico. Solos dos organizaciones se registraron en el Tribunal Supremo Electoral (TSE) para hacer campaña en el departamento: el MAS hará proselitismo por el Sí y el Comité Cívico Potosinista, por el No.

¿Preguntado en torno a si tendrán o no un impacto las movilizaciones de julio en el referendo de septiembre, el jefe de bancada de Potosí, David Ramos (MAS), asume que sí. “Puede tener un efecto negativo, eso es cierto, no lo vamos a negar”, afirmó el asambleísta.

Sin embargo, dijo que el estatuto promovido por el partido en función de gobierno entre los temas más relevantes impulsa el aprovechamiento de los recursos naturales, a lo que nadie debiera oponerse. “El no viabilizar y defenestrar desde la oposición, eso sí sería una traición. El departamento de Potosí no se dejará sorprender con esas posturas”, sostuvo.

Barrientos dijo que el voto castigo “en la ciudad” tendrá mayor contundencia cuando el oficialismo intente abrir la Constitución Política del Estado para plantear la reelección del presidente Evo Morales. En la ciudad de Potosí, gobernó por más de una década el ahora senador oficialista René Joaquino, aunque todo ese tiempo fue opositor. En la última elección, el candidato del MAS triunfó por un porcentaje bajo, si se compara con el voto campesino.

ATENCIÓN PRORITARIA

Por su parte su colega Franklin Flores (MAS) coincidió que los ministros de Estado pudieron atender de manera prioritaria las demandas de Potosí, si es que estás habían sido planteadas hace varias gestiones. “Si los compromisos han sido hechos en anteriores gestiones, los ministros debieron priorizar y trabajar en los temas”, puntualizó.

El 26 de junio, Comcipo inició una marcha desde la frontera de Oruro con Potosí hacia La Paz. En esta ciudad protagonizaron una serie de movilizaciones exigiendo al Gobierno central que atienda sus demandas y denunciando la permanente postergación de este departamento. Protagonizaron protestas, marchas, hubo amagues de enfrentamiento con la policía, gasificaciones y al final un diálogo truncado con actas de seis comisiones firmadas sólo por el Gobierno y sin que se realice el plenario donde supuestamente la entidad cívica iba a develar que el 80% de los puntos del pliego no hallaron solución en las comisiones.