México.- La mutilación genital femenina (MGF) es una práctica endémica en 28 países africanos y entre las poblaciones inmigrantes en Europa y América, que afecta a más de 30 millones de mujeres, indicó ayer en Ciudad de México la médica y activista Olayinka Aina Koso-Thomas.
“Es necesario ejercer más presión en los Gobiernos nacionales y entablar un debate sobre el tema, así como proteger los derechos de las mujeres para propiciar que vivan saludablemente y tengan vidas productivas”, destacó Koso-Thomas durante una intervención en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
La activista nigeriana divulgó estos datos en la conferencia magistral “Riesgos de salud asociados a la MGF y estrategias para su erradicación. La experiencia de Sierra Leona”, que contrastan con los más de 140 millones de casos de mujeres y niños denunciados por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La MGF consiste en cortar los labios menores y mayores del área genital o el clítoris, o suturar la vulva para dejar solo un espacio para la salida de la orina y el flujo menstrual, explicó.
“Hoy se somete a personas de cualquier edad a la MGF, aunque tradicionalmente se practicaba justo antes de la pubertad. En tiempos previos, el periodo de iniciación duraba de uno a dos años; hoy puede ser tan corto como una semana”, expuso.