Sao Paulo.- La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, afirmó ayer durante una entrevista a un canal de televisión que “jamás” ha pensado en dejar su cargo, a pesar de los fuertes movimientos para un eventual juicio político en su contra, de la crisis política y de los problemas que afronta la economía del país.
“Jamás pienso en renunciar”, indicó Rousseff en una entrevista concedida al canal SBT, en la que aseguró que aún con la “redemocratización” del país, tras una dictadura militar que gobernó entre 1964 y 1985, “hubo sistemáticamente intentos de golpe”.
De acuerdo con la presidenta, “la cultura de golpe (de Estado) todavía existe, pero no creo que haya condiciones materiales de ocurrir”, en una crítica al intento de destituir a “una “representante legítimamente electa por el voto popular”. (EFE)