Madre acusada de violencia pide disculpas

Lidia Q., madre de familia captada en video agrediendo a uno de sus hijos con agua fría que salía de una manguera, expresó ayer su arrepentimiento por las acciones generadas contra el menor y pidió no ser separada de sus hijos.

“Por favor no quiero que me separen de mis hijos, estoy arrepentida con todo lo que ha ocurrido, perdónenme, los extraño a mis hijos. Estoy arrepentida, perdónenme no voy a volver nunca más a hacer eso, perdónenme, ayúdenme a recuperar a mis hijos, quiero recuperar a mi hijos”, expresaba la madre en su defensa luego de que autoridades de justicia definieran su arresto domiciliario, precautelando de esta manera la seguridad del último de sus hijos que actualmente se encuentra en gestación.

Para el representante del Defensor del Pueblo en la urbe alteña, José Luis Hidalgo, si bien la solicitud de la madre es entendible, los estudios psicológicos y de médico forense realizados a los hijos de Lidia dieron como resultado que éstos eran constantemente sometidos a un proceso de violencia, razón por la que se inicia un proceso judicial en contra de la madre.

“En caso de que ella quisiera recuperar a sus hijos, proceso que no será de manera inmediata, ella debería recibir un tratamiento psicológico en el Centro de Atención de Terapia (CAT), instancia que atiende atenciones de terapia familiar”, explicó.

De acuerdo con las declaraciones de Hidalgo, al estar el caso judicializado es el juez quien debe definir el tema de tratamiento psicológico, tiempo de terapias a realizar y conclusión del proceso, con la posibilidad de que este procedimiento garantice no sólo mejorar la conducta y control de la ira por parte de la madre, sino la seguridad de que el menor o los menores que logren vivir con ella puedan tener la garantía de que sean tratados adecuadamente con el afecto maternal correspondiente.

Asimismo, aclaró que es el juez quien debe disponer en que tiempo y bajo qué condiciones la madre pueda realizar visita a sus hijos, quienes en la actualidad se encuentran a cargo de las familias ampliadas tanto de ella, como del padre de los dos últimos menores.

“Por lo tanto, es la autoridad judicial la instancia que debe aprobar o rechazar todos esos procedimientos que se cumplan, más aún cuando la madre realice la solicitud correspondiente mediante los memoriales con los que ella pueda requerir desde los tratamientos psicológicos, las visitas y finalmente con el tiempo la posibilidad de recuperar o no a los menores”, indicó.

Si bien es la CAT la instancia que debe realizar el tratamiento psicológico, la incertidumbre está en que si esta misma instancia podrá realizar el seguimiento correspondiente a la conducta de la madre después del tratamiento psicológico, para asegurar la estabilidad emocional y garantizar la relación afectiva con sus hijos.