Alvaro Numbela T.
Los jueces deben hacer frente a un aumento considerable del número de asuntos que se ha duplicado en los últimos años, realidad que paraliza muchas jurisdicciones. Lejos de mitos y de misterios, ahí va la cuestión fundamental que motiva cumbres espurias. ¿Cómo se presenta este infortunio?
LA CUMBRE DEFINE LA REFORMA
La Sra. Virginia Velasco, ministra de Justicia, piensa que la solución de la crisis judicial está en la realización de otra “cumbre”, de las tantas realizadas con propuestas de instituciones y los movimientos sociales afines al Gobierno. En tanto que otros creen que la renovación de jueces y vocales debe hacerse para mejorar la justicia. Finalmente, otros en escena -más espectacular- dan cuenta que fueron “destituidos 22 fiscales y a otros se les hizo descuentos de su salario por montos desde 5% al 40%” (1). Y para terminar -con este rosario de desaciertos que retrasan nuestra realidad judicial - no se sabe qué hacer con 156 “conciliadores” que presionan para trabajar, así sea “socializando una ley que no tiene contenido sociológico. ¿Por qué toda esta realidad?
Pues, en buenos años de gestión gubernamental no se ha aprendido que los únicos que puede violar la Constitución son los poderes políticos: Legislativo y Ejecutivo. Consecuentemente, léase el Art. 12 de la misma y sabrá por qué el ejecutivo no debe ocuparse de “cumbres”.
LA REVOLUCIÓN JUDICIAL
Con una escoba que pretende barrer a todos los componentes del Poder Judicial, ¿cumbres judiciales?, ¡no! Hay que admitir una reflexión que se da con gran actualidad. El boliviano o boliviana lucha para obtener el reconocimiento de un derecho o la reparación por un perjuicio. La afluencia de contenciosos paraliza ciertas jurisdicciones a nivel del Tribunal de Apelación como al del Tribunal de Casación o Supremo.
Es preciso saber que cada asunto en el Tribunal Supremo exige como mínimo de un día a día y medio de trabajo. Imagine lo que esto implica. Por otra parte, siempre hay que tener presente que para tener una justicia adaptada a cada caso, a cada hombre o mujer el buen Juez hace un trabajo de artesano, todos los días y caso por caso. Dentro de esta realidad -muy a pesar de las reformas realizadas desde 2005- los métodos de trabajo no han cambiado fundamentalmente. La red judicial no ha evolucionado, sigue la misma. Un trabajo del juzgador que hace todo con sus colaboradores, ahora los Supremos que tienen asistentes tratando de hacer justicia en cadena.
Hay que lograr una mejor conciencia de esta realidad que no toca la puerta exacta. Un mejor conocimiento oportuno de técnicas de organización, que no cuesta dinero menos burocracias innecesarias, evitaría los muchos PATINAZOS en el que se encuentra el sistema judicial boliviano. A este respecto y sin sentirme muy orgulloso de haber dirigido muchos años seminarios y ciclos internacionales de actualización jurídica pienso que es necesario comprender el mundo judicial desde adentro, a través de experiencias sobre el terreno. Así de simple resulta cuando se aprecia la problemática contemporánea del Desarrollo, todo muy lejos de aplicar torniquetes, que determinados regímenes de gobierno sustentan, creyendo que así se aviva el debate político y se alimenta la conspiración mediática.
1.- Correo del Sur: Régimen disciplinario destituye a 22 fiscales, Sucre, 10 de agosto de 2015. Pág. 1.
2.- Ídem.
Usurpado el 7 de octubre de 1970, por defender EL DIARIO |
Dirección:
Antonio Carrasco Guzmán
Jorge Carrasco Guzmán |
Rodrigo Ticona Espinoza |
"La prensa hace luz en las tinieblas |
Portada de HOY |
Caricatura |