Oposición celebra aprobación de refugio para exsenador en Brasil

El oficialismo discrepa con la decisión, sostiene que Roger Pinto debería volver al país para responder ante la justicia.

Los asambleístas de oposición en la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP) celebraron ayer la aprobación del refugio para el exsenador, Roger Pinto, otorgado por el Comité Nacional para los Refugiados (Conare) en Brasil, asegurando que esto es una muestra de que se pudo “judicializar” la política.

La diputada por el Partido Demócrata Cristiano (PDC), Norma Piérola, aseguró que con la disposición de las autoridades brasileñas se comprobó que Roger Pinto “sí era un perseguido político”.

“Don Roger Pinto sí era perseguido político, él demostró ampliamente esa persecución política sañuda de parte del Gobierno central, a partir de que él hiciera denuncias con referencia al narcotráfico”, dijo que a partir de ahora, el exsenador boliviano podrá seguir “una vida normal” en Brasil.

Entretanto, la senadora por la alianza Unidad Demócrata (UD), Jeanine Añez, aseveró que con el logro de Pinto se consiguió “judicializar la política”, además consideró que la decisión de Brasil es muestra de solidaridad.

La legisladora beniana reflexionó que el visto bueno del Conare demuestra que la comunidad internacional “comienza a entender la situación política que se vive en el país”.

Al respecto, varias voces del oficialismo al interior de la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP) consideran que Pinto continúa siendo un prófugo de la justicia boliviana, por lo que demandaron su retorno al país para responder ante ella.

El exsenador posee diversos procesos en Bolivia. Antes de huir al Brasil vivió por 15 meses en la Embajada de Brasil en La Paz, tras declararse perseguido político.

En la víspera se conoció que el Conare, Brasil, aprobó el asilo que solicitó el exlegislador boliviano. Según el abogado Fernando Tiburcio, el asilo habría sido aprobado el pasado 31 de julio pero que aún no fue oficializado.

Pinto, en contacto con Radio Fides, reconoció, pese a no tener la notificación de manera oficial, que obtener el asilo no fue una tarea fácil. “Aquí en Brasil hay un dicho que dice que lo único fácil es hacer rodar a un borracho y esa frase describe cómo fue este proceso”.