I
Wilfredo Landa A.
Indudablemente que el C-47 (conocido comercialmente como el DC-3) ha sido uno de los aviones que mayor demanda tuvo en el mundo, sea por las Fuerzas Aéreas, Ejércitos o líneas aéreas comerciales (ex LAB).
A decir de muchos pilotos fue un avión “muy noble” y en nuestro país por su variada topografía geográfica se convirtió en avión “legendario”, particularmente para los pilotos del TAM, que en una buena época ingresaban a Tipuani sorteando el majestuoso “Centinela”, tumba de muchos de ellos. De esta manera la aviación militar se consagra mundialmente por la audacia y pericia de los pilotos de Transporte Aéreo Militar (TAM).
Pretendo reflejar la forma como nace, se reproduce y mantiene todavía hasta nuestros tiempos, glorificando el nombre de su creador Donald Douglas, quien jamás pensó que este modelo perpetuaría su memoria en todo el mundo.
Entre los mayores fabricantes de aviones, Douglas es el único que ha recorrido el cielo espectacular de la aviación, desde los primeros aviones a hélice hasta los de motor a reacción de hoy.
Donald Douglas llegó a Los Ángeles, California, en 1920 con su esposa, sus dos hijos, un perro, un ruidoso auto y 600 dólares en ahorros. Con sus 28 años era graduado en el Instituto Técnico de Massachusets, sirvió en la Primera Guerra Mundial en el Ejército norteamericano como consultor técnico del cuerpo de Señales; trabajó, aunque por breve plazo, con Glem Martin, proyectando el bombardeo Martin, primer avión que hundió un buque de guerra.
Instaló una oficina en la trastienda de una peluquería y para mantener a su familia se empleó como jornalero. Cierto día, su amigo el periodista Bill Henry llevó a la peluquería el pedido de un avión de 40.000 dólares. El cliente, el rico deportista David Davis, quería conquistar una nueva marca, un vuelo sin escalas a través de Estados Unidos. En aquellas épocas la principal razón de ser de los aviones era establecer marcas.
Ese avión fue bautizado Cloudster y se construyó a mano en un desván, con herramientas alquiladas en una fábrica de pianos. Contaba con seis ayudantes, cuyas mujeres cosieron la tela sobre el armazón de las alas. La falta del motor le costó a Davis la marca deseada, pero el Cloudster conquistó otra mayor importancia, fue el primer aeroplano capaz de levantar su propio peso en carga útil.
Inmediatamente se convirtió en un éxito entre los círculos militares y en 1921 la Armada de EEUU pidió tres aviones adaptados para llevar torpedos.
Más tarde proyectó biplanos monomotores, anfibios que efectuaron la primera circunnavegación aérea el mundo.
Los negocios con el Ejército ayudaron mucho, pero no hicieron realidad el sueño de Douglas, que era hacer que el público, acostumbrado a viajar por tierra, prefiriese hacerlo en avión. Las primeras aerolíneas habían comenzado precariamente y volando sólo de día, pero lograban subsistir principalmente con las subvenciones que les daba el Gobierno por llevar correo.
Usurpado el 7 de octubre de 1970, por defender EL DIARIO |
Dirección:
Antonio Carrasco Guzmán
Jorge Carrasco Guzmán |
Rodrigo Ticona Espinoza |
"La prensa hace luz en las tinieblas |
Portada de HOY |
Caricatura |