73 mineros de la mina de carbón Santa Ana en Curanilahue, provincia de Arauco, en el sur de Chile, llevan más de 11 días a más de 650 metros de profundidad para reclamar que se les pague el dinero que se les debe.
El pasado martes 11 de agosto los 170 trabajadores de la mina iniciaron una huelga indefinida para protestar por la falta de pago de los sueldos de julio y agosto así como las cotizaciones de salud y seguridad social desde hace un año.
Pero 78 de ellos fueron más allá de un paro ordinario y decidieron no salir del yacimiento, aunque cinco de ellos se han visto obligados a salir por cuestiones de salud.
Se dice que las deudas ascienden a 400 millones de pesos (unos $us 570.000).
“Mineros y familia, por un trabajo digno” es el lema que mantiene a los trabajadores firmes en su acción de protesta, desafiando las malas condiciones en las que se encuentran a tal profundidad.