Oruro tiene 34 mil arbolitos que reverdecen en octubre

Oruro, (EL DIARIO).- Oruro tiene 34.000 arbolitos que reverdecen en octubre, cuando se han terminado los efectos del invierno. Las plantas florecen y muestran hermosos colores y alegran a la vista de cualquier ciudadano, pero aún hay quienes no aprecian las cosas diferentes de esta ciudad.

“Oruro no ha cambiado nada”, dicen los visitantes de otras ciudades, cuando llegan a esta capital. Desde lejos, sólo se pueden advertir los cerros San Pedro, San Felipe y la imagen sobresaliente de la Virgen del Socavón, encima del cerro Santa Bárbara.

Otros dicen: “Parece lo mismo. No hay lugares donde se pueda pasear o disfrutar de la naturaleza”.

Los demás, dicen que la ciudad de Oruro “es tan pequeña, porque se llega a la Terminal de Buses, se da una vuelta a la plaza 10 de Febrero y después se pasa por los mercados y nada más”.

Esas apreciaciones son ciertas, cuando se recorre por el mismo camino. No ha cambiado nada, porque no se han descubierto los lugares más hermosos que tiene Oruro. Todos, siempre han llegado a la plaza 10 de Febrero. No sólo es ver los animales de bronce, traídos de Francia o los querubines. Hay una variedad de plantas y árboles que nunca han existido en Oruro.

La hermosura de la plaza es innegable, al igual que la del Parque Castro y Padilla, que se encuentra al lado este.

La plantación de los primeros arbolitos ha sido fácil. Cada año se plantan miles de árboles en la ciudad, pero, en esta lucha contra la naturaleza de Oruro, una tierra sobre los 3.706 metros sobre el nivel del mar, con un invierno que llega hasta los 10 o 12 grados bajo cero, ha debido costar mucho cuidado lograr el crecimiento de aquellos árboles de 1904, en una tierra considerada inhóspita.

Sin embargo, existen lugares ecológicos muy importantes. Los árboles no solamente están en algunas calles, mostrando el verdor de sus hojas en octubre, noviembre, diciembre, enero y febrero. Desde marzo, ya empiezan a caerse las hojas y cuando el frío está arreciando en junio y julio, los arbolitos parecen estar secos, muertos, y se vuelve a mostrar la aridez de la tierra y la constante lucha por un medioambiente más agradable, como en otras partes del país.

El parque ecológico Pisco Ujyana, se encuentra en el barrio de Rumy Campana, cerca de la mina San José, un lugar protegido de los vientos, donde la gente de Oruro escoge como el mejor sitio para olvidarse de la aridez y los vientos. Ahí se advierten árboles de toda clase. Hay pinos, álamos, kiswaras y otros. Existe césped natural durante todo el año, precisamente por el permanente cuidado.

Las familias acuden al lugar, cargando su parrilla, para disfrutar de un medioambiente diferente. Debajo de los árboles, se puede advertir la tranquilidad y se puede respirar aires diferentes que le hacen bien a cualquier ciudadano. Es un refugio hermoso, donde se complementan con canchas de futsal, voleibol o los parques infantiles o pequeñas cabañas construidas con palos y ramas secas.

Desde la Terminal de Buses, jamás se puede apreciar ese parque ecológico. Tampoco desde los mercados. El mantenimiento de los centenares de árboles y las plantas tiene un costo elevado para la Municipalidad, pero vale la pena contar con esos espacios, para que todos puedan disfrutar del sitio diferente al que se advierte en otras partes de la ciudad.

Según las normas internacionales, Oruro debería tener 2.6 millones de árboles y apenas tenemos 34.000. Aún hay mucho que hacer. La época de plantar arbolitos ha llegado con octubre. El tiempo es corto, pero nada es imposible, como para preparar la plantación de millones de arbolitos alrededor de la ciudad. Para los orureños, los arbolitos son y deben ser sagrados siempre, porque el costo y su mantenimiento son muy complicados.