Diplomacia boliviana no debe caer en el juego chileno

El Gobierno boliviano mostró una actitud diplomática poco seria y frágil frente a la estratégica diplomacia chilena, ante la cual, una vez más algunas autoridades cedieron, lo cual, desde el punto de vista de las relaciones internacionales muestra debilidad, afirmó la experta en Derecho Internacional, Diana Borelli. Bolivia debe ser más cauta en el tema marítimo y dedicarse ahora enteramente a alimentar con más argumentos la demanda boliviana.

“Con la solicitud de entrevista de un diputado chileno, entramos al juego de Chile porque después de ese resultado tan importante de La Haya a favor nuestro, considero que ya deberíamos estar preparándonos para la contramemoria que Chile va a presentar. Deberíamos trabajar en ampliar nuestros argumentos, a trabajar para reforzar nuestra posición y no hacer caso a lo que Chile pida o diga porque la Corte de La Haya, ya se ha pronunciado y fue a favor nuestro”, manifestó.

El hecho más importante y el único que se debe tomar en cuenta es la resolución de La Haya –afirmó Borelli– tras recordar todo el escenario mediático que se armó con el fallo de los jueces de la Corte Internacional de Justicia que se declararon competentes para conocer la demanda boliviana. Entre esos hechos, la invitación del canal estatal chileno a Carlos Mesa para ser entrevistado en ese país, hecho que fue aplaudido y destacado hasta por los propios chilenos, hasta que el diputado de ese país, Jorge Tarud, reclama que “por reciprocidad diplomática” debieran entrevistar en Bolivia a autoridades chilenas.

“Ahí entramos al juego de Chile y no entiendo cuál es la necesidad de dar lugar a las exigencias de un diputado chileno y aceptar una entrevista a Muñoz y Bulnes. Lamentablemente, no hay mesura ni prudencia en algunas acciones de las autoridades bolivianas”, observó la especialista.

Otro de los aspectos que observó Borelli del Gobierno chileno y su diplomacia es que “siempre ha tenido una política verbal incluso agresiva, por ejemplo, cuando se refieren a nosotros siempre dicen el país altiplánico, el país de las montañas”.

“Yo diría que Chile maneja una diplomacia maquiavélica y Bolivia hoy en día maneja una diplomacia de los pueblos, son dos diplomacias que no se pueden encontrar”, afirmó Borelli y recomendó que lo más sensato que el Gobierno puede hacer es trabajar en alimentar los argumentos de Bolivia en la demanda marítima, pero trabajar en silencio, y esperar el fallo de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya.

PROCESO

Un día después de declararse competente para conocer la demanda marítima boliviana, la CIJ definió que el 25 de julio de 2016, el equipo jurídico de Chile deberá presentar la contra-memoria. Ese es el siguiente paso en el proceso judicial que emprendió su curso.

Histórica. Así fue la jornada del jueves 24 de septiembre cuando a las 09.00 de la mañana el presidente de la CIJ desde el Palacio de La Paz, Holanda, Ronny Abraham, daba lectura a las partes más importantes del fallo de los jueces y se declaraba como competente en la demanda marítima que puso Bolivia contra Chile para obligarle a negociar mediante un diálogo pacífico, una salida soberana al mar. 14 votos a favor de Bolivia y dos en contra fue el resultado de la respuesta de los jueces de este tribunal internacional.