La Organización de Nacionales Unidas (ONU) ha advertido ayer de que casi cuatro millones de personas están amenazadas por la hambruna en Sudán del Sur y 30.000 podrían morir de inanición, debido a la situación en algunas partes del país donde, asegura, podría desencadenarse una catástrofe.
“El hambre extrema está empujando al pueblo al borde de una catástrofe en partes de Sudan del Sur” aseguraron tres agencias de la ONU en un comunicado en el que indicaron que 3.900.000 sursudaneses se enfrentan a una “inseguridad alimentaria severa”.
La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), el fondo de la ONU para los niños (Unicef) y el Programa Mundial de Alimentos (PMA) han insistido en que “al menos 30.000 personas están viviendo en condiciones extremas y se enfrentan a la inanición y la muerte” en el Estado de Unidad (norte).
Las tres agencias pidieron al Gobierno y a los rebeldes que se enfrentan desde hace dos años, que garanticen “urgentemente y sin restricciones” el acceso a esta región sursudanesa para intentar paliar esta situación. Sostienen que, por primera vez en dos años, desde que estalló la guerra civil en el país, una región del país alcanza este nivel de degradación. (Publico.es)