La anunciada exportación de productos de la planta de urea y amoniaco podría sufrir retrasos debido a que la ferrovía que permitirá trasladar la producción de 2.100 toneladas de urea y 1.200 toneladas de amoniaco diarias hasta Montero (Santa Cruz) aún no está en condiciones de entrar en funcionamiento.
El presidente de la estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Guillermo Achá, dijo en agosto que la planta contemplaba un avance del 76% en su construcción y garantizó su funcionamiento para el segundo semestre de 2016. En la misma fecha el ministro de Obras Públicas, Milton Claros, declaró que el avance de la ferrovía es del 30 o 40%.
Esta situación pondría en riesgo la rentabilidad del primer proyecto petroquímico del país.