Dos menores fueron salvados de morir después de recibir dosis de vodka para contrarrestar el anticongelante para vehículos que tomaron sin darse cuenta, ocasionando susto y temor en sus padres. Recibieron atención médica en la Unidad de Terapia intensiva del Hospital Materno Infantil, informó la Caja Nacional de Salud (CNS).
Los dos hijos, curiosos, observaban lo que hacía su papá, quien entre otras cosas, tenía un anticongelante que, seguramente, por su color, era atractivo para ellos. Bastó un breve tiempo de descuido para que estos tomaran el tóxico, como si se tratara de refresco.
Ante este cuadro se utilizó vodka, bebida alcohólica que tiene un alto contenido de etanol, químico que contrarresta de manera efectiva e inmediata el etilengol. Este tratamiento se realizó por casi 24 horas. Después de las 72 horas en terapia intensiva, se sacó del coma a los hermanos.