“Adiós, hasta el próximo año…” fue la consigna y el sentimiento con que miles de pobladores en La Paz, al igual que en el resto del país, despidieron a las almas de sus difuntos que por 24 horas estuvieron en el mundo terrenal, según marca la tradición popular y católica del pueblo boliviano.
En el cementerio Jardín de la zona Sur se celebró una misa masiva para todos los difuntos que descansan en su subsuelo. El Cementerio General recibió a familias enteras que recordaron a sus fallecidos. el denominado “La Llamita” del macrodistrito Periférica fue el espacio para que muchas personas pasaran el feriado junto a las tumbas de sus seres queridos. No faltó la fruta, la repostería, los refrescos, los rezos y las canciones dolientes
