Santa Cruz.- Hormando Vaca Díez, médico de cabecera del cardenal Julio Terrazas, informó ayer que el estado de salud del prelado es muy delicado al no ingerir alimentos con normalidad, por lo que necesita recuperar peso para confrontar los problemas de insuficiencia renal y cardiaca que adolece.
“Necesita recuperar cinco kilos, sin embargo, desde el domingo ha vuelto a decaer su apetito y recibe pocos alimentos”, dijo el galeno.
Vaca Díez no descartó que el cardenal vuelva a ser internado en una clínica para recibir cuidados intensivos.
Terrazas, de 79 años, de momento está en su residencia tras ser dado de alta a principios de agosto de la clínica Incor, donde estuvo internado por el lapso de dos meses.
Vaca Díez explicó que el líder religioso debe recibir a la semana un promedio de tres diálisis renales y que los efectos secundarios de todo ese proceso provocan que se agote físico.
Terrazas nació en Vallegrande el 7 de marzo de 1936 y fue elevado a rango de cardenal por el papa Juan Pablo II en 2001.
De acuerdo a una información proporcionada por Erwin Bazán, vocero del Arzobispado en Santa Cruz, la vitalidad de Julio Terrazas Sandoval es reducida, por lo que se puede comprender que su salud sea inestable.
“Hay días en que está mejor y otros en que decae. Esto es una constante en la salud del cardenal, pues se trata de una persona que tiene debilitado el corazón y debe resistir tres veces por semana a que le hagan diálisis por el estado de sus riñones”, sostuvo.
Informó que este cuadro clínico que sufre el cardenal ya data desde julio, cuando incluso fue visitado por el papa Francisco, en una clínica local y que en un acto de gran valentía se dio modos para dejar unas horas dicho centro de salud para unirse al encuentro de los obispos de Bolivia con el sumo pontífice en la parroquia de La Santa Cruz.
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