Auditoría externa al Fondo Indígena

El fondo de desarrollo para los pueblos indígenas y comunidades campesinas fue creado para financiar, con el 5% del impuesto directo a los hidrocarburos (IDH), proyectos de desarrollo productivo y social para las comunidades indígenas de tierras altas y bajas.

Tal finalidad altruista ha sido desvirtuada en su esencia por la gigantesca corrupción imperante en el Fondo Indígena, donde millones de bolivianos se hallan flotando en la nebulosa, a la espera de esclarecimiento por los responsables que estuvieron a la cabeza de la institución: ministro(a), miembros del directorio, técnicos, asesores, dirigentes indígenas y campesinos (Fondioc, Conamag, Bartolinas, Conalcam, etc.), quienes ya debieron rendir cuentas de sus fechorías o debieron estar aprehendidos por la justicia. Pero lo más curioso de este caso es que todavía tienen la osadía de asumir la representatividad del soberano, es decir del pueblo boliviano para pedir al Gobierno, por ejemplo, la realización del próximo referéndum 2016, etc.

DISPARIDAD EN CIFRAS Y PROYECTOS

Por información de la prensa nacional se sabe que se aprobó 3.177 proyectos, de los cuales 1.100 habrían recibido recursos que estarían bordeando los 102 millones de bolivianos, advirtiéndose que muchos proyectos serían fantasmas. (ED - 31/8/2015).

Por otra parte, la Contraloría informa que hay daño económico al Estado de 71 millones de bolivianos por 153 proyectos no ejecutados y que “todavía existe un contingente de proyectos que están en investigación, no existe rendición de cuentas ni documentación que respalde el uso de recursos” (28/2/2015).

La ministra Nemesia Achacollo informa que el Fondo Indígena recibió desde el año 2006 al año 2014 la suma de 3.197.482.681 bolivianos (ED -12/6/2015).

Por lo visto el panorama que se observa del Fondo Indígena es sombrío y repudiable por la pésima e irresponsable administración de los recursos del Estado. Por eso es notoria la reacción y descontento de los indígenas y campesinos al manifestar que solo sirvieron y sirven para viabilizar el enriquecimiento ilícito de sus dirigentes, además para ser utilizados como marionetas en las concentraciones masivas y manifestaciones en apoyo al mandamás de turno.

AUDITORÍA EXTERNA

Para clarificar definitivamente la estafa millonaria al Estado es imprescindible practicar una auditoría externa, para conocer, por ejemplo:

1.- El monto de los recursos transferidos al Fondo Indígena por el Ministerio de Economía y Finanzas. 2.- Transferencia de recursos a cuentas personales. 3.- Conocer en detalle las obras e inspección ocular a los proyectos. 4.- Conocer las obras por adjudicación directa o licitación pública.

El cambio de nombre del Fondo Indígena será más de lo mismo, será como el adagio popular que dice: “la misma chola con otra pollera”.

Al concluir, la clase indígena y campesina ha sido engañada vilmente por sus mismos congéneres dirigentes y por los funcionarios del gobierno populista.