Efectivos de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) detuvieron ayer a Giovanni Q., joven dedicado al consumo de tinner, acusado de ser el presunto responsable de la muerte de Norca Pareja de 33 años.
Por otra parte, los uniformados detuvieron también a Cristian P., ciudadano que robaba imágenes de la parroquia Cuerpo de Cristo con el presunto interés de utilizarlas en un culto satánico, según informó indicó el director de la unidad coronel Félix Rocha.
PRIMER CASO
De acuerdo con el informe de la autoridad policial, el primer caso se refiere a un robo agravado en el que el acusado habría asesinado a su víctima a cuchilladas. El cuerpo fue encontrado el pasado 28 de diciembre.
“El joven, de 20 años, registra antecedentes policiales a nivel local y se dedica a consumir tinner, bebidas alcohólicas y con la finalidad de lograr dinero para este propósito victimó a una mujer de 33 años”, explicó el coronel Rocha.
El acusado, en el momento de ser presentado a los medios de comunicación, negó ser responsable de la muerte de la mujer y dijo haber llegado al lugar después de la muerte de esta persona,
“No la conozco a esta persona ella murió indican a las 03.00, pero yo llegue después a las 11 y estaba yo en estado de ebriedad”, indicó el sindicado, quien también habría generado heridas cortopunzantes a un menor de 15 años.
SEGUNDO CASO
Con relación al robo de imágenes sagradas, el joven fue detenido en flagrancia por parte de los vecinos de la zona, quienes vieron al acusado tratando de salir de la iglesia con la escultura de San José.
“Se trata de una estatua de San José que sacó del nacimiento y estaba siendo transportada por el joven”, explicó el coronel Rocha.
En tanto, el joven detenido, quien estaba sobrio y vestido de ropa negra, dio a conocer que se trataba de una exigencia de su “religión satánica”, donde se le pide sustraer la imagen mencionada.
“Mi religión me incitó a hacer esto, yo soy satanista”, indicó el acusado.
CASO KEYLA
Por otra parte, Rudy Terrazas, fiscal asignado al caso de la beba Keyla desaparecida luego del asesinato de su progenitora, dio por concluido el proceso de búsqueda en el botadero municipal de Alpacoma, factor que le permite modificar la acusación en contra de los implicados por el delito de trata y tráfico de persona.
“Con la empresa de limpieza y recojo de basura en la ciudad de La Paz, Seremu, se entregó notas indicando que hasta la fecha no se realiza el rastrillaje, por la complicación del proceso con otro equipo especializado y el posible daño ambiental que se genere, razón por la que, en coordinación con los abuelos, la empresa en fecha 31 de diciembre decide cerrar la búsqueda en el relleno sanitario”, indicó el fiscal.
Keyla, la beba de ocho meses, sigue desaparecida desde el pasado 6 de octubre, día en que su madre, Evelyn Peñaranda, muriera víctima de feminicidio. Luis Javier Morales Herrera, feminicida confeso, es quien aseguró que también mató a la niña, pero todas las referencias sobre el lugar donde supuestamente habría abandonado el cuerpo de la niña llegaron a ser falsas.
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