Postrado en la cama de su departamento ubicado en inmediaciones de la Plaza Isabel la Católica, Marco Cámara, propietario del local nocturno Katanas, reveló ayer los detalles del secuestro e intento de extorsión del que afirma fue víctima por dos tres días. Entre sollozos lamentó que la denuncia presentada, involucre a miembros de su familia.
Por otra parte, aseguró como una posible causa de su secuestro al interés que su expareja tiene sobre su dinero y propiedades.
Sus familiares, el viernes en dependencias de la fuerza anticrimen, afirmaron que el jefe de familia había sido secuestrado y que por su libertad pidieron 100 mil dólares. Mientras los investigadores sometieron a un peritaje el vehículo donde se encontraba Cámara, el momento de su plagio, y que fue hallado en Bajo Llojeta.
En un relato detallado sobre lo acontecido del 5 al 8 de enero, en los que, Cámara, asegura, fue secuestrado por dos personas con acento peruano, resalta que al momento de hablar de posibles responsables del presunto plagio contra una de sus hijas y su exesposa.
Según su testimonio, que ayer fue hecho oficial ante la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen, el 5 de enero, mientras conducía su camioneta con dirección a El Alto, Cámara fue interceptado por dos personas vestidas de policías, quienes lo maniataron y llevaron a una zona alejada, lo mantuvieron dentro del maletero de un vehículo más pequeño.
Manifestó que todo el tiempo estuvo encapuchado con una tela rasgada por la cual sólo podía ver algunos detalles y que le pidieron 80.000 dólares, que los captores creían que tenía en su poder por la venta de la camioneta en la que lo interceptaron. También, aseguró que sólo lo sacaban para golpearlo y le hicieron firmar varios documentos y cheques, por un valor de 200.000 dólares, de una cuenta que él asegura tiene cerrada hace varios años.
Al final de la entrevista, tendido en la cama de su departamento, con el fin de corroborar su testimonió, fuera de cámaras, mostró las lesiones que los supuestos plagiadores le causaron tanto en manos, cuerpo y genitales.
MÓVILES
"Yo estoy casi seguro que es ella, no tengo idea si (a los plagiadores) los contrató o son sus amigos", afirmó Cámara al ser consultado si creía que entre los autores intelectuales estaba su exesposa y la hija de 24 años, que este tiene con ella.
Aseguró que desde el interior del maletero, él pudo oír las conversaciones con el que parecía el jefe del grupo al que llamaban “Tico Coco o Tiro Loco”, y una mujer de nombre “Sonia”, igual que su expareja. Aseguró que logró escapar aprovechando que sus secuestradores se dedicaban a beber alcanzó un fierro con el que cortó las cuerdas que lo tenían amarado y logró huir.
Al respecto, el ministro Carlos Romero pidió que se realice una investigación sobre este caso.
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