Inminente colapso de la minería

La industria minera del país, tanto la estatal como la privada, enfrenta una crisis de proporciones, con peligro de que se profundice en próximas temporadas, como ocurre desde el año pasado. Pero ese poco menos que catastrófico problema económico no solo afecta a la minería sino a toda la población y en particular a las finanzas del Estado, que estuvo gozando de bonanza durante los últimos diez años.

Esa conclusión es resultado de datos estadísticos sobre la economía minera proporcionados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), que destaca en forma general que los ingresos generales durante el año pasado disminuyeron en más del 30 por ciento, con la perspectiva de sufrir nuevos descensos en el futuro. Los productos afectados por ese perjuicio son los hidrocarburos, metales y minerales, sin tomar en cuenta los relacionados con otros sectores como agricultura, turismo, etc. Esa situación, poco menos que grave, se debería a la abrupta caída de los precios de las materias primas a nivel internacional.

En efecto, el descenso de los ingresos por exportación de minerales en diez meses de 2015 fue del 13 por ciento (de dólares 1.697 millones a 1.476 millones). Con más detalle se tiene los siguientes datos.

La baja de los ingresos del wolfram fue de 20.3 por ciento y del estaño del 19.7 por ciento. Cosa parecida pasó con los ingresos de la plata que bajó en 19.3 por ciento, mientras el cobre y el plomo fueron afectados con algo más del 16 por ciento. Solo el oro mantuvo cierta estabilidad y originó pérdidas del 0.6 por ciento.

En cuanto al oro metálico el valor de las exportaciones se redujo en 47 por ciento (de 1.185 millones en 2014 a solo 625 millones de dólares en 2015). En cuanto a la joyería de oro, sin embargo, se registró una elevación algo mayor al 112 por ciento.

En lo que se refiere a la exportación de lingotes de estaño por la Empresa Vinto, también registró un bajón de más del 24 por ciento (de 292 millones en 2015 a 221 en 2015). Con referencia a la exportación de plata metálica también se constató el descenso en más del 27 por ciento (el 2014 se vendió 112.8 millones de dólares, mientras el 2015 solo se vendió 82 millones)

En términos generales, el valor total de la caída de los ingresos en la minería en diez meses del año 2015 fue del 31.7 por ciento en relación con el año anterior. Es más, podrá subir aún más cuando se incluya los meses de noviembre y diciembre.

En cuanto al valor de las exportaciones de hidrocarburos la situación no fue menos angustiosa. En efecto, la exportación de gas fue el 39 por ciento menor en 2015 en relación con el año 2014. En efecto, el valor del gas exportado a Brasil y Argentina descendió en 36.3 por ciento. Más propiamente, los ingresos se redujeron a 3.443.6 millones de dólares.

En conceptos específicos, mientras en la gestión 2014 el país registró ingresos por 5.400 millones de dólares, el año 2015 registró ingresos de sólo 3.500 millones, lo que significa la caída del 35 por ciento, ateniéndonos siempre a datos oficiales.

En suma, esas pérdidas en el ingreso de divisas al país muestran en forma objetiva un futuro muy poco optimista que comprende, además, la caída del 32.5 por ciento en la producción agrícola, las pérdidas de Huanuni en 26 millones de dólares, el nuevo bajón del petróleo a menos de 30 dólares el barril, la caída del estaño a 6 dólares libra final y otros que han hecho afirmar al Fondo Monetario Internacional (FMI) que ¡“Bolivia depende más de las exportaciones que hace 15 años”!, vale decir que, en términos políticos, su condición de dependencia colonial es mayor que en el tiempo del “neoliberalismo”.