Argentina se mantiene en alerta por el avance del dengue en todo el país, donde ya ascienden a 1.100 los casos diagnosticados, con afectados también en Buenos Aires y situación de brote epidemiológico en las provincias del norte fronterizas con Brasil y Paraguay.
El secretario de Promoción de Programas Sanitarios del Ministerio de Salud, Néstor Pérez Baliño, explicó que Argentina ya pasó de la “etapa de contención”, en la que se analiza intensivamente cada caso, a la de “mitigación”, donde al tratar a pacientes de zonas de brote, que viajaron a países con epidemia (como Brasil y Paraguay) o que tuvieron contacto con alguien que lo hizo, se considera directamente dengue y se le aplica tratamiento sin medir serología.
Las provincias de Formosa y Misiones, en el noreste del país y limítrofes con Brasil y Paraguay, tienen los focos más importantes con más de 900 afectados, mientras que en el resto de provincias “hay casos”, sin que se hable de situación de “brote” y con contados contagios autóctonos, indicó Pérez.
“En Formosa y Misiones hay ya una circulación permanente del virus y claramente podemos hablar de brote”, puntualizó.