Defensoría del Pueblo denuncia irregularidades en 16 colegios

La Defensoría del Pueblo denunció que, luego de una inspección a las unidades educativas alteñas, se registró la existencia de cobros indebidos, ausencia de baños adecuados y falta de aulas en 16 colegios.

De acuerdo con la información de la entidad, las verificaciones defensoriales fueron realizadas entre el 18 y el 20 del presente mes, con la finalidad de supervisar el proceso de inscripción de estudiantes nuevos y alumnos de transferencia, según el cronograma establecido en la Resolución Ministerial 001/2016; “sin embargo, según la explicación que se da más adelante, dicho cronograma varió según la organización interna de las unidades educativas”, indica el informe.

Entre las 16 unidades educativas visitadas se encuentran: España, Italia, 27 de Mayo, América Panorámica, Bolívar B, Venezuela, Cristal Copacabana 1, Atipiris y Habana Cuba, de las cuales sólo una es de convenio y las restantes son del sistema público.

COBROS

Según el informe, de las 16 unidades educativas, 12 realizaban cobros de algún tipo a los padres de familia, en el momento de la inscripción, procedimiento que estaba a cargo de las juntas escolares, quienes no demostraron tener algún documento en mano que respalde dicha exigencia.

Los cobros oscilaban entre los Bs 2 y 150 bolivianos por cada menor inscrito en una misma familia, montos que, de acuerdo a las juntas escolares, sirven como tarjeta de junta, multas, pago de ítem a profesores, agenda escolar, hoja de compromisos y el propio desayuno escolar, bajo el argumento de que éste es un aporte voluntario, pero que, sin dicho pago, los padres de familia no accederían al derecho de inscribir a sus hijos, aspecto que contradice resoluciones ministeriales y la propia Constitución Política del Estado donde se pone en manifiesto que la educación escolar es gratuita.

INFRAESTRUCTURA

Un segundo factor que fue observado son en las condiciones físicas en las cuales se inician las labores educativas, donde 11 de las 16 unidades sólo tienen letrinas con pozos sépticos como baños para los estudiantes, cuyas instalaciones no tienen mantenimiento y muchas de ellas no tienen agua. Sólo tres establecimientos tienen condiciones de baño higiénico.

“Los casos más serios en tema de infraestructura son las unidades educativas Copacabana 1 en la que no se cuenta con baño, ni aula para la promoción, varias aulas no tienen vidrios y una de ellas se tuvo que clausurar por el mal estado del tumbado; 27 de Mayo también tiene aulas en pésimas condiciones, un laboratorio a medio construir y un aula de computación clausurada, mientras que en la Unidad Educativa José Manuel Pando los padres de familia improvisan arreglos según sus posibilidades, y Alejandro Maldonado no tiene energía eléctrica”, establece el informe.

De las 16 unidades, siete tienen insuficiencia en la cantidad de aulas, razón por la que algunos establecimientos buscan solucionar este problema dividiendo en dos turnos, mañana y tarde, con la finalidad de responder a la demanda de inscripción.

La Defensoría del Pueblo, mediante su representante en la urbe alteña, recomienda: “La necesidad de merecer una atención al incumplimiento a la disposición sobre la no necesidad de inscripción de los estudiantes antiguos, bajo el pretexto de que muchos padres de familia no informan a la unidad educativa sobre el cambio de sus hijos, por lo cual los directores exigen la confirmación de la continuidad a través de la presentación de una serie de documentos durante la semana de inscripciones, lo cual no es otra cosa que la inscripción de estudiantes antiguos. Para evitar lo anterior, se ve la necesidad de establecer otras alternativas; por ejemplo, incluir entre los requisitos para los estudiantes de transferencia, la carta recepcionada por la unidad educativa anterior en la que informa su cambio a otra unidad”, concluye el informe.