Sobre contaminación del Lago Titicaca

Señor Director:

Tengo el agrado de dirigirme a usted a fin de saludarle y a la vez hacer referencia al artículo de opinión “Contaminación del lago Titicaca precisa soluciones permanentes”, escrito por el señor Antonio Bazoberry Quiroga, publicado por EL DIARIO el día sábado 16 de enero pasado, tanto en su versión impresa como digital, en el cual se hacen referencias al Perú y a la situación del lago Titicaca, las cuales son incorrectas y por tanto merecen ser aclaradas.

En primer lugar, el señor Bazoberry indica que “en realidad la contaminación del Titicaca precisa soluciones permanentes, tomando en cuenta que las causas principales de contaminación se deben a que el Perú envía aguas contaminadas al río Desaguadero, después de ser utilizadas en su territorio”. Esta opinión no se ajusta a la realidad de lo que sucede en el lago Titicaca puesto que, como se sabe, el lago se encuentra dividido en dos cuerpos de agua: el lago mayor al norte y al sur el lago menor o laguna de Wiñaymarka, que están separados por la península de Copacabana con el breve paso de Tiquina.

Ahora bien, estudios binacionales realizados han demostrado que la contaminación en el lado peruano se presenta en su mayor parte en la bahía interior de Puno y en las desembocaduras de los ríos Coata y Ramis, todo ello en la parte septentrional del lago mayor. En el lado boliviano, el principal problema de la contaminación se ubica en la bahía de Cohana, en el lago menor, punto en el que desemboca el río Catari, el cual capta las aguas residuales de El Alto, Viacha, Laja, Pucarani, Puerto Pérez y otras poblaciones menores que vierten sus aguas servidas a dicho río.

Como se recordará, el año pasado entre los meses de marzo y abril, fue justo en esa área que se presentó un “bloom” de contaminación que ocasionó la muerte de distintas especies de aves, batracios y peces, a la vez que afectó la calidad del agua, y que de acuerdo con denuncias de pobladores en la ínsula peruana de Anapia, los efectos de este incidente ambiental se sintieron inclusive en el lado peruano del lago. Adicionalmente, debe tenerse presente que el río Desaguadero nace en la laguna de Wiñaymarka, es decir en un punto mucho más cercano a la bahía de Cohana que a la bahía de Puno. Así, la afirmación del señor Bazoberry antes citada no sólo carece de fundamento técnico sino que, por tanto, lleva a la confusión de los lectores de su prestigioso diario.

Por otra parte, en el cuarto párrafo del mencionado artículo de opinión el señor Bazoberry señala que “el Ing. Amilcar Gaita Zanatti en 1996 fue nombrado como presidente ejecutivo de la ALT (Autoridad Autónoma del lago Titicaca), quien contratando personal peruano procedió a desarrollar las actividades relacionadas que correspondían al Sistema TDPS, incluyendo la construcción de una presa de regulación de las aguas de excedencia del lago Titicaca, complementada con obras de dragado a lo largo del lecho del río Desaguadero”.

Al respecto, debe precisarse que Bolivia y el Perú crearon en el año 1996 a la ALT como una entidad binacional para el manejo, ordenamiento y control de los recursos hídricos del sistema Titicaca, Desaguadero, Poopó y del Salar de Coipasa (TDPS), y de acuerdo con sus Estatutos el personal de dicha entidad es de nacionalidad boliviana o peruana, procurando una distribución equilibrada; siendo que en la práctica la mayor parte del personal es boliviano. Además, un hecho muy importante que omite el señor Bazoberry es que para el funcionamiento de la ALT, ésta depende de los Ministerios de Relaciones Exteriores de Bolivia y el Perú que, con el apoyo de sus brazos operativos y comisiones técnicas integradas por entidades nacionales de cada país, son los que aprueban sus planes operativos. En otras palabras, las obras que ejecuta la ALT no son determinadas por ella, sino que son propuestas a los Estados que son los que, de manera conjunta, deciden si se ejecutan o no.

Posteriormente, el señor Bazoberry indica que “el Ing. Gaita, de nacionalidad peruana, convirtió la presa de regulación en una presa de retención de sedimentos y al no haberse cumplido con el dragado total del río Desaguadero, se interrumpió la salida de las aguas del lago al cerrar las compuertas de la presa, obstaculizando la escorrentía del Desaguadero, que con el tiempo fue la causa para que el lago Titicaca se convierta en un gran depósito de aguas servidas provenientes de las poblaciones bolivianas y peruanas”.

Sobre este asunto lo que el señor Bazoberry no escribe, quizá por desconocimiento, es que Bolivia y el Perú, con el apoyo de la cooperación europea, encargaron un estudio sobre el TDPS, labor que fue ejecutada por una consultora internacional especializada y cuyo producto fue el “Plan Director Global Binacional de Protección-Prevención de Inundaciones y Aprovechamiento de los Recursos del Sistema TDPS”, el cial fue aceptado y aprobado por ambos países en 1995 y que es la pauta técnica para el adecuado manejo del TDPS, en procura de darle sostenibilidad al mismo. Este plan contiene varias recomendaciones y una de las principales fue la construcción de la obra de regulación (que no es una presa) del Desaguadero, proyecto que fue ejecutado por ambos países. Además, también debe aclararse que en el 2001 se concluyó con las labores del dragado en el río Desaguadero para asegurar el flujo de dicho río hacia el resto del sistema, y que en los últimos años ha sido el Perú el que ha financiado en su integridad los trabajos de mantenimiento de ese dragado.

De otra parte, en cuanto a la operación de las compuertas de la obra de regulación, ésta obedece a criterios técnicos contenidos en el Plan Director Global Binacional, el que se reitera fue aprobado por Bolivia y el Perú. Además ante la sugerencia del señor Bazoberry de que la ALT “debería proceder a la apertura de las compuertas de la presa y al dragado total del río Desaguadero para facilitar el escurrimiento de las aguas excedentes del lago Titicaca, que conjuntamente con las aguas del Desaguadero sigan aumentando la disponibilidad de agua en el lago Poopó”, debe mencionarse que dichas compuertas han estado siempre abiertas debido a que no se han presentado las situaciones que contempla el Plan Director para que éstas se cierren, por lo que la idea expuesta por el señor Bazoberry y que da a entender que estas exclusas están cerradas es incorrecta, induciendo al error. Igualmente, se reitera que el dragado en el Desaguadero en su tramo inicial se ha venido ejecutando de manera regular, financiado, en los últimos años, en su totalidad por el Perú.

Respecto a la mención de que “para resolver la contaminación del lago Titicaca, que precisa soluciones permanentes, es necesario que Bolivia y Perú firmen acuerdos para solucionar el problema del desvío hacia Tacna del río Maure (Perú) o río Mauri (Bolivia)”, no existe ningún estudio que señale que el uso de las aguas del citado río tenga impacto alguno sobre la contaminación en el Titicaca, esto por la sencilla razón que el Maure-Mauri es un río afluente del Desaguadero, no del Titicaca, y que se encuentra varios kilómetros más abajo de la naciente del Desaguadero. En cuanto al uso de las aguas de este río, que es de cauce internacional y por lo tanto puede ser aprovechado por ambos países, es de indicar que Bolivia y el Perú han establecido una Comisión de Trabajo Binacional a fin de poder establecer, de una manera técnica y consensuada, el uso compartido de sus aguas en beneficio de los pueblos de ambos países; comisión que viene trabajando de manera continua y armoniosamente para tal propósito.

También, llama la atención que el señor Bazoberry, al referirse a la problemática del Poopó, no haga mención a los muchos otros factores que, según han señalado las propias autoridades bolivianas, habrían provocado lo sucedido en dicho lago, centrándose sólo en ciertos aspectos que, como se ha explicado precedentemente, son inexactos o que carecen de fundamento y que por tanto confunden a los lectores de su prestigioso medio de comunicación.

Finalmente debo señalar que las prejuiciadas e inexactas informaciones y apreciaciones contenidas en el citado artículo, lejos de constituir un aporte positivo en la búsqueda de soluciones al complejo problema del lago Poopó y del sistema TDPS en general, incitan maliciosamente una controversia cuando la armonía entre peruanos y bolivianos es precisamente una condición indispensable para trabajar de manera conjunta y eficiente en la preservación, protección y aprovechamiento racional de los recursos hídricos que compartimos, para beneficio de nuestros pueblos y de las generaciones futuras.

Sin otro particular, hago propicia la ocasión para renovarle las expresiones de mi más alta y distinguida consideración.

Benjamín Chimoy Arteaga

Embajador del Perú