Estados Unidos y Rusia anunciaron ayer que una cesación de hostilidades entrará en vigor en Siria el sábado 27 de febrero. En una declaración conjunta, los representantes de las dos potencias dijeron que el alto al fuego involucra a las partes que han estado combatiendo durante los cinco años del conflicto sirio, pero no al grupo Estado Islámico ni al Frente Al-Nusra, organización afiliada a Al-Qaeda.
El secretario de Estado norteamericano, John Kerry, quien estuvo trabajando con su homólogo ruso, Sergei Lavrov, para alcanzar el acuerdo, saludó el alto al fuego.
El alto al fuego en Siria entraría en vigor después de cinco años de una brutal guerra civil que ha dejado más de 260.000 muertos y ha provocado el desplazamiento de la mitad de su población, incluidos unos cuatro millones al exterior.