Corea del Norte respondió ayer con un lanzamiento de misiles de corto alcance a la nueva y más dura resolución del Consejo de Seguridad de la ONU, cuyas sanciones amenazan con ahogar la economía del país y agravar su crisis humanitaria.
El Ejército Popular norcoreano disparó desde la localidad de Wonsan, al sureste del país, seis misiles que recorrieron entre 100 y 150 kilómetros hasta caer en el Mar del Este (Mar de Japón), informó el Ministerio de Defensa surcoreano.
Como respuesta al lanzamiento, China pidió a todas las partes implicadas en el conflicto “actuar con responsabilidad” y desde la cancillería de Pekín se instó a retomar las conversaciones a seis bandas (con las dos Coreas, EEUU, Japón y Rusia) tras las sanciones impuestas el miércoles por la ONU.
De tratarse de misiles balísticos como los KN-01, se trataría de una violación de hasta cinco resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU, aunque el organismo internacional no suele actuar cuando se trata de este tipo de lanzamientos de proyectiles de corto alcance, relativamente habituales.
Corea del Norte mostró de esta manera tan poco ortodoxa su disconformidad con la resolución 2270, aprobada el miércoles por los 15 miembros del Consejo de Seguridad como represalia por los ensayos nuclear y de misiles llevados a cabo por Pyongyang en enero y febrero, respectivamente. (EFE)