Gobierno emprendió “guerra sucia” contra los medios de comunicación

Frente a las constantes quejas del Gobierno de sufrir una “guerra sucia” por parte de sectores contrarios a su política, los analistas Jimmy Ortiz y Luwdig Valverde creen que en realidad el que ha entrado en ese “juego” es el Órgano Ejecutivo, pero que ahora lo hizo contra los medios independientes del país.

En ese marco, el experto cruceño Jimmy Ortiz sostuvo que el Órgano Ejecutivo, sus ministros, especialmente Juan Ramón Quintana, comenzaron a acusar a los medios de “mentirle el país, y que por esa situación tienen la intención de cerrar a varios de ellos. Ortíz hace hincapié en que el ministro no dice nada en torno a la desinformación que generan medios estatales.

PEDIDO

A su juicio, el Gobierno en el ámbito de la democracia debe aprender sobre pluralismo en los medios. “Así como el oficialismo tiene sus medios estatales que dicen lo que quieren, también debe tener la cultura democrática de entender que existen otros pensamientos que pueden ser diferentes con su punto de vista sobre el acontecer nacional, lo que no implica que mientan”, subrayó.

“El ministro Quintana tiene ese estilo duro de tratar los asuntos públicos, lo cual aprendió de gobiernos anteriores y en épocas de dictadura”. Añadió que, en vez de incurrir en la “guerra sucia”, tiene que abrirse a las críticas y entender que los medios de comunicación tienen que informar y sobre esa base el derecho a opinar.

“FANTASMAS”

Ortiz dejó considera que el Gobierno está viendo “fantasmas” donde no los hay y no quiere entender que el país es de todos, es decir, de la derecha, izquierda e incluso de los anarquistas, los que en su generalidad tienen derecho de pensar sobre el quehacer nacional.

“El pueblo en su generalidad quiere vivir mejor, sin corrupción y en un país donde el Gobierno debe aprender a escuchar las críticas, porque las mismas construyen y sólo los “tiranos” no quieren escuchar comentarios en contra”, enfatizó.

Según el analista, en democracia la crítica no sólo es necesaria sino obligatoria, puesto que es un derecho que tiene la población y que ahora en buena medida esas críticas se expresan en los medios de comunicación y en las cuestionadas redes sociales, que se han convertido en una nueva forma de comunicación.

ANALISTA LUDWIG VALVERDE

Respecto a la intención del ministro Quintana de cerrar algunos medios de comunicación contrarios a la política gubernamental, el presidente del Colegio de Politólogos de La Paz, Ludwig Valverde, calificó aquello como una decisión absolutamente equivocada.

Valverde interpreta esa temática en dos sentidos: primero, dice, el MAS en 10 años de Gobierno se ha caracterizado por desarrollar una estrategia de “victimización”, es decir, mientras más víctima se consideró el Presidente, el Gobierno y el mismo denominado proceso de cambio, mejores réditos de solidaridad y apoyo recogió en determinados momentos.

Asimismo, sostuvo que esa estrategia ya no funciona más porque el presidente Morales y el MAS han perdido credibilidad respecto a determinadas acciones, situaciones y explicaciones que no han podido estar a la altura de las circunstancias, para convencer a la sociedad boliviana y a la opinión pública, a partir principalmente del escándalo de corrupción desatado en el exFondo Indígena.

ERRADA ESTRATEGIA

En ese marco, estima que a partir de ese momento es que el partido en función de gobierno comienza a perder credibilidad y, por tanto, Valverde considera que esta estrategia de “victimización” debe ser superada por el oficialismo, el mismo que tiene que asumir su responsabilidad y generar confianza suficiente en la ciudadanía como para que los procesos que se están investigando y que “salpican” a Morales y a su entorno presidencial, sean lo suficientemente transparentes.

“En segundo lugar, además de esta credibilidad que debe recuperarla, están las acciones duras de un ministro como Quintana, que solamente quiere amedrentar a la ciudadanía. Me parece que está queriendo comprarse un lío con los medios de comunicación en general, además que quiere regular las redes sociales y sus alcances, lo que a su juicio no va a ser tarea fácil ni viable.

En ese marco, sugirió al Ministro de la Presidencia emprender una política sincera de acercamiento con los medios de comunicación en esta coyuntura difícil que está atravesando el oficialismo, puesto que los errores cometidos por el Gobierno no son culpa de los medios de comunicación ni de las redes sociales, sino del propio Órgano Ejecutivo, el mismo que debe enfrentar y dar una solución definitiva a los problemas que se crea y, en general, lo agobian.