"El show debe continuar", y eso fue lo que hizo la Orquesta Sinfónica Boliviana, que ayer y el pasado miércoles dieron inicio a la temporada con el concierto “Mar Azul sueños de Libertad”.
La expectativa por el primer concierto de la temporada era grande, no sólo por los problemas internos que le rodean a la Orquesta desde el año pasado, sino también porque se presentarían obras inéditas de 1879, pertenecientes a grandes personalidades históricas del país. Esas expectativas fueron resueltas, cuando el público presente se puso de pie para ovacionar la gala.
El director interino Cristhian Asturizaga, agradeció a los asistentes y pidió a través de los medios, cooperación para que la orquesta tenga nuevos socios y de esta forma llevar adelante este proyecto ambicioso en el que trabajan.