Bolívar bajó la guardia y Boca se llevó un valioso empate (1-1)

Para el Bolívar de anoche, las ambiciones no podían ser demasiadas porque inopinadamente se regaló en el segundo tiempo y así le fue. Boca Juniors con un bombazo de tiro libre desde 30 metros, cuanto expiraba el choque, y cuyo ejecutor fue Federico Carrizo transformó en desazón lo que parecía ser festejo del local. Trabajoso empate de Copa Libertadores para el celeste (1-1) que perdió lucidez ante un adversario tozudo y respondón.

El tanto de apertura fue obra de Erwin Saavedra que con un formidable disparo de derecha desde 25 m, sorprendió a Agustín Orión (28’ PT)

El ‘xeneize’ que había salido en desventaja tras el primer capítulo de un lance cerrado, con mucha marca, tuvo una buena lectura en el período complementario ante un Bolívar que no encontró la tranquilidad y equilibrio para sostener un pleito con muchas complejidades por la jerarquía individual y colectiva del acartonado cuadro boquense que virtualmente le quitó el balón.

Si bien técnicamente el juego no ha sido bueno. Las ambiciones para los celestes no podían ser demasiadas, porque no aparecieron las figuras desequilibrantes y a la postre esa carencia de imaginación para hacer más llevadero el compromiso y la igualdad cayó como castigo por entregar apenas centímetros de su clase de lo que mostró frente al colombiano Cali al que goleó por 5-0.

Al ‘Apache’ Tevez y compañía no podía irles peor, porque trabajaron bien en el complemento, y tomaron la iniciativa en la posesión del balón, tocándole la puerta a Quiñonez en cuatro a cinco opciones creadas al influjo del aplomo de Franck Fabra y el incansable Fernando Gago que le dieron talla a la propuesta de la visita.

EL PARTIDO

Callejón con un derechazo (9’), puso en emergencia a Orión que saca el balón al corner. Borghello ensaya otro disparo (20’) sin consecuencias.

Exceptuando el gol de Saavedra (28’), a Bolívar le costaba vivir en tres cuartos de cancha, porque el rival con orden le cortaba los circuitos.

Juan Insaurralde arrancó frío en zona roja de Bolívar (32’), su disparo cerca al madero derecho estuvo a punto de sorprender a Quiñonez.

Meli un centro rasante ponía otra vez en apuros a la zaga local (35’).

En el segundo tiempo, la iniciativa pasó a manos de la visita, puesto que la ‘academia’ c laramente retrasó sus líneas y los boquenses ses empeñaron en llenar de balones territorio de enfrente, y el nerviosismo hacía presa del local. Los cambios que hizo Bolívar, no surtieron efecto, porque se perdió consistencia en medio campo, y los ‘xeneizes’ iban tejiendo jugadas por ambas bandas, y el nerviosismo cobraba espacio en filas de Bolívar. Meli se cansó de llevar balones al frente junto a Gago, Pérez y Tevez frecuentaban la zona roja en los últimos 15 minutos . Una falta a 30 metros cuando se jugaban descuentos (48’), Carrizo con un “bazucazo” venció a Quiñonez, el balón llegó alto y venció la custodia del meta. Fin de la brega.

Genaro Orellana