Hernán Maldonado
Allá por 1974 sus opositores políticos pusieron en duda la nacionalidad del presidente venezolano Carlos Andrés Pérez, atribuyéndole haber “nacido” en Colombia. El líder socialdemócrata, ni corto ni perezoso, presentó su certificado de nacimiento en Rubio, estado de Táchira, y acabó con el chismorreo en un santiamén.
42 años después, los venezolanos le exigen a Nicolás Maduro que haga lo mismo, tras surgir evidencias de ser un ilegítimo presidente por haber nacido en Colombia y, en el menor de los casos, de tener doble nacionalidad, lo que le hubiera impedido tajantemente asumir el cargo.
Cuando surgieron las primeras sospechas, la presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Tibisay Lucena, exhibió fugazmente la “partida de nacimiento” de Maduro en una entrevista televisada, asegurando que éste nació en la parroquia de La Candelaria, en Caracas.
Poco después, Elías Jaua, ex vicepresidente, reveló que Maduro nació en la barriada de El Valle, aunque el propio Maduro lo desmintió, asegurando que nació en la parroquia de Los Chaguaramos. En un acto, con Maduro presente, el gobernador del estado Táchira dijo que nació en El Palotal, en su estado. ¿Por qué estas contradicciones?
El diputado Walter Márquez descubrió que Maduro inscribió el 25 de octubre de 1994 el certificado de defunción, a los 65 años, de su madre Teresa de Jesús Moros, “nacida en Rubio, estado de Táchira”. Seis ex rectores del CNE se preguntan ¿por qué Maduro mintió?, dado que hay irrefutables pruebas de que su madre era de origen colombiano.
Los ex rectores al pedir al CNE que muestre la partida de nacimiento, le recuerdan a Lucena que “según el artículo 96 de la Constitución Política de Colombia, Nicolás Maduro es ´colombiano de nacimiento´, por ser hijo de madre colombiana y por haberse domiciliado en territorio colombiano durante su juventud”.
Al pedido de los ex rectores se han sumado unas dos docenas de militares retirados de alta graduación y un centenar de personalidades. Todos exigen que la Asamblea Nacional (AN) inicie una averiguación exhaustiva. En las redes sociales, mientras tanto, aparecen cotidianamente fotos de los años mozos de Maduro en Cúcuta, Colombia, fronteriza con Táchira.
Márquez ha desempolvado libros del Registro Civil en Colombia sin resultados positivos porque se encontró con que se han esfumado precisamente páginas en esos libros que podían dar luz sobre el asunto. ¿Quiénes ordenaron que se los hiciera desaparecer?
La oposición venezolana está empeñada en sacar a Maduro del cargo mediante enmienda constitucional, revocatorio o renuncia, pero ganan más simpatizantes, los que piensan que esos pasos son a largo plazo porque, si Maduro no presenta su partida o se comprueba que la falsificó, su salida del cargo no pasaría de 5 días. Aterroriza el solo pensar en lo que ocurriría.
Quizás por esto es que el presidente de la AN, Henry Ramos Allup, en un discurso el sábado en Caracas ante miles de manifestantes que pedían la dimisión del líder chavista, exigió: Maduro, “ahórranos la tragedia. ¡Renuncia!” Amanecerá y veremos.
El autor es periodista. Ex UPI, EFE, dpa, CNN, El Nuevo Herald. Por 43 años fue corresponsal de ANF de Bolivia.
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