Las nuevas revelaciones de Gabriela Zapata, expareja de Evo Morales, puso en aprietos nuevamente al Gobierno. “Él se ha convertido en un monstruo del poder. Lo único que espero es que se respeten los derechos de un niño”, dijo Zapata al abandonar el Juzgado Tercero de Familia, donde debía declarar ayer.
Zapata Montaño también reiteró que el hijo en común con Evo Morales esta con vida, pero se encuentra resguardado desde 2010. Además, dijo que las declaraciones las hizo una vez que fueron los ministros con sus versiones los que levantaron la reserva impuesta por la juez del menor.
Eduardo León reveló la existencia de una prueba de ADN, de hace cuatro año, que certificaría la paternidad de Morales.
Por su parte, la ministra de Comunicación, Marianela Paco, horas más tarde afirmó que Gabriela Zapata, investigada por supuesto tráfico de influencias, mintió una vez más porque no presentó al supuesto hijo del Jefe de Estado como había prometido a las autoridades jurisdiccionales.
Entretanto, el expresidente Jorge Quiroga pidió a Morales no distraer el fondo de la investigación que es el “tráfico de influencia”.