La centralidad de la política

Todos los días, los noticieros (de televisión y radio), así como las revistas informativas, se ocupan (casi) exclusivamente de la política, de los políticos y de la politiquería (es decir de los chismes sobre los políticos).

La política se volvió el centro de atención de los medios, cualquier otro tema dejó de ser relevante.

Yo me pregunto: ¿Acaso no hay otras cosas para informar? ¿Por qué el menú de estos programas sólo incluye política, política y más política?

La audiencia está obligada a desayunar, almorzar y cenar política y más política. ¿Eso es todo lo que ocurre en nuestro país? ¿No hay otras temáticas más propositivas? ¿Por qué tenemos que comer, soñar y vivir sólo política?

Lamentablemente, la política está asociada a escándalos, corrupción, abusos de poder, etc. Es decir cosas negativas que nos intoxican cada día.

Obviamente hay sucesos políticos saludables y positivos (aunque cueste encontrarlos), pero pareciera que los periodistas y comunicadores sólo buscan el escándalo, lo negativo, lo feo… si investigan un poco encontrarán algo más positivo.

Sé que ustedes dirán que la política es muy importante porque tiene que ver con temas que nos interesan a todos (estoy de acuerdo), pero no lo es todo, hay otros temas que merecen ser difundidos y destacados.

Cuando encendemos la televisión o escuchamos la radio ya sabemos que el menú del día será: política y más política. Es necesario salir de esa lógica y proponer a la ciudadanía temas alternativos que tengan que ver con desarrollo humano, investigación, avances tecnológicos, cultura, educación, innovación, emprendedurismo, etc.

(*) Consultor en Comunicación. Director de Xperticia, empresa de asesoramiento y capacitación en Comunicación.

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