Autoridades bolivianas y la empresa china Sinosteel suscribieron ayer el contrato para la construcción de una planta siderúrgica piloto en el Mutún, acto que contó con la presencia del presidente Evo Morales en la localidad fronteriza de Puerto Suárez.
La inversión para este proyecto asciende a $us 422 millones, de los cuales el 85% es financiado con crédito chino, mientras que el restante 15% sale del tesoro boliviano. La planta podrá procesar 650 mil toneladas de mineral bruto al año y obtendrá 414 mil toneladas de concentrado.