Washington.- El presidente de EEUU, Barack Obama, dio ayer la bienvenida a los líderes de más de 50 países e inauguró la Cumbre de Seguridad Nuclear, que se centrará en evitar que los materiales necesarios para construir un arma atómica caigan en manos de grupos terroristas como el Estado Islámico (EI).
Con una cena de bienvenida en la Casa Blanca, el mandatario estadounidense inauguró la cuarta Cumbre de Seguridad Nuclear, en la que se espera que los líderes mundiales conversen sobre medidas para evitar que el grupo yihadista EI acceda a los materiales nucleares que varios países albergan para su uso civil o militar.
En una reunión previa a la cena, Obama aseguró que su homólogo francés, François Hollande, ha “movilizado a la comunidad europea” en el combate al terrorismo, y ambos analizaron formas de estrechar la cooperación bilateral en esa materia para evitar nuevos ataques como los de Bruselas y París. (EFE)