Obispos: “Las situaciones autoritarias no van”

El vocero de la Iglesia Católica, Edwin Bazán, afirmó ayer que la carta pastoral que hace referencia al tema de narcotráfico y que fue hecha pública el pasado viernes es para poner en evidencia una problemática de la sociedad y que no responderán al ultimátum que hizo el Gobierno para dar nombres de autoridades vinculadas a las drogas.

"No creo que tengamos que preocuparnos por los ultimátum, ese tipo de situaciones autoritarias no van (...). Estamos hablando de una carta pastoral que es el reflejo de una experiencia y conocimiento directo de la gente de una problemática, por la que tendríamos que preocuparnos", dijo Bazán.

El presidente Evo Morales conminó a la Iglesia a dar nombres hasta el lunes de las personas vinculadas al Gobierno que estarían involucradas en el narcotráfico.

La carta pastoral denuncia que el narcotráfico estaría inmerso en "varios niveles de gobierno" sin sustentar con nombres y detalles de quién o quiénes serían los involucrados.

En la jornada del lunes, diferentes voceros del Movimiento Al Socialismo (MAS) indicaron que la Iglesia Católica debe aclarar y presentar los nombres de los funcionarios públicos y de los dirigentes o militantes que están comprometidos con el narcotráfico.

El viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales, Alfredo Rada, dijo ayer, en La Paz, que la carta pastoral de la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB) se basa en juicios de valor y carece de datos e información estadística.

Rada manifestó que antes las cartas pastorales de la Iglesia Católica tenían mucho cuidado en su redacción, tenían fuentes y estaban "respaldadas por información estadística y no por información empírica, no por juicios de valor".

"La diferencia que noto con esta última carta pastoral que ha emitido la Iglesia es que al parecer hay bastantes juicios de valor", explicó.

"A mí me parece muy bien (la aclaración) que (pide) el presidente Evo Morales ya que la carta pastoral dice que hay una especie de infiltración del narcotráfico en las esferas estatales, está bien que el Presidente diga que se digan los nombres y apellidos de las personas que estarían involucradas con el narcotráfico con el Gobierno y en el Estado", puntualizó.

En tanto que el ministro de Defensa, Reymi Ferreira, aseguró que la Iglesia Católica tiene una posición apresurada, prejuiciosa y política de la lucha contra el narcotráfico en Bolivia.

"Mientras organismos internacionales, como organismos especializados de la Unión europea elogian el trabajo del Gobierno boliviano en materia de lucha contra el narcotráfico, la iglesia tiene una posición, repito, apresurada, con prejuicios y diría hasta política", remarcó a los periodistas. (Radio Fides)