Zapata pide que Quintana sea imputado por tráfico de influencias

La expareja del presidente Evo Morales, Gabriela Zapata, pidió ayer que el ministro de la presidencia, Juan Ramón Quintana, sea imputado dentro del caso de tráfico de influencias, debido a que fue él quien le autorizó el uso de las oficinas de la Unidad de Gestión Social de esa Unidad.

El pedido de Zapata fue hecho a la Comisión de Fiscales que sumó dos nuevos delitos en contra suya, según informó su abogado Eduardo León.

Daniel Ayala, miembro de la comisión de fiscales se apersonó ayer al Centro de Rehabilitación de Miraflores, con el fin de tomar declaraciones a Zapata, luego de que determinaran ampliar la investigación por otros dos delitos, “contribuciones y ventajas ilegítimas”, cargos que se les formulan solo a funcionarios públicos.

“La señora Zapata se ha acogido a su derecho constitucional de guardar silencio, bajo este contexto se ha elaborado el acta respectiva y en los siguientes días se va dar a conocer más información”, afirmó Ayala, a su salida del penal de Miraflores.

El 28 de marzo, la también madre del hijo del presidente Evo Morales envió una carta al ministro Quintana, en la que además de hacerle responsable de lo que le pueda pasar a su persona, le pedía que deje de mentir al Primer Mandatario y al país, recordándole, con ironía “mi rey”, haciendo alusión a las conversaciones que ella mantuvo vía WhatsApp, con el ministro de la Presidencia, dada la relación sentimental que tenían.

En ese sentido, el pasado jueves, miembros de la Comisión Mixta de la Asamblea, que investiga el caso en el área política, comunicaron que Zapata afirmó que fue Quintana quien autorizó su ingreso a diferentes dependencias del Ministerio y que por esta razón solicitarían que la autoridad también se presente a declarar.

Con estos antecedentes, el abogado de Eduardo León dio a conocer ayer que su clienta pidió al fiscal Ayala, le deje acogerse “al derecho al silencio”. “Pero solicito y pido se convoque al señor Juan Ramón Quintana, en calidad de sindicado, porque él sabe bien a qué entraba y cómo entraba y cómo me autorizaba para que yo entre al Ministerio de la Presidencia”, pide Zapata.

Por su parte, el fiscal Ayala recalcó que se ha verificado que Zapata mantuvo reuniones con varias personas en estos ambientes, pero se abstuvo de dar nombres y no dejó claro cuál era el procedimiento que se seguía para esas visitas o reuniones.

Hasta ahora, Quintana ha sido convocado a declarar como “testigo” de los hechos.

La expareja del Presidente está detenida preventivamente en el penal de Miraflores, con los cargos de supuesto enriquecimiento ilícito, corrupción pública, falsedad, delitos contra la riqueza nacional, entre otros.