Desbaratan banda de monrreros

El director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) de la ciudad de La Paz, Gary Omonte, presentó ayer a tres monrreros, dos varones y una mujer, que violentaban bienes inmuebles de la ciudad de La Paz. Encontraron ocho armas de fuego en su poder.

La orden de allanamiento permitió el ingreso a los domicilios de los presuntos delincuentes, ubicados en la calle Palos Blancos. Se realizó una investigación previa antes del allanamiento, debido a denuncias que se habrían efectuado en su contra.

APREHENDIDOS

“Fueron aprehendidos tres ciudadanos, el ciudadano Harol Esteves, Moisés Paco y Cinthya Luizaga, estos tres ciudadanos forman parte de esta asociación delincuencial de monrreros”, informó en oficinas de la Felcc.

Al momento de la aprehensión, dijo que se los encontró en posesión de ocho televisores plasma, 2 cajas fuertes, teléfonos celulares, microondas y seis armas de fuego y gas lacrimógeno para reducir a sus víctimas, entre otros objetos que habrían sido fueron sustraídos.

“Todos estos elementos fueron hallados en poder de esta asociación de monrreros, y continuarán las investigaciones correspondientes porque lo que se busca es identificar a otros miembros que presumiblemente estuvieran implicados también”, dijo el jefe policial.

Informó que las tres personas tienen antecedentes penales de robo agravado y falsedad material, entre otros delitos.

DENUNCIAS

“El ciudadano Harol Esteves tiene cuatro denuncias por el delito de robo agravado, Chinthia Luizaga tiene antecedentes por el delito de falsedad materia y el ciudadano Moisés Paco presenta antecedentes por el delito de hurto”, detalló.

Omonte instó a las víctimas de robo visitar las oficinas de la Felcc para identificar los objetos sustraídos e identificar a los malhechores y poner una denuncia formal.

“Pedimos a la ciudadanía que venga hacer el reconocimiento de la sustracción de objetos que se han identificado, porque hay cajas fuertes, armas, televisores, entre muchas otras”, concluyó.

Hasta el cierre de edición, las víctimas de estos antisociales estaban prestando sus declaraciones ante el fiscal.