París.- Miles de trabajadores y estudiantes volvieron ayer a protestar en Francia contra la reforma laboral del Gobierno socialista, en una jornada que se saldó con perturbaciones en los transportes y altercados entre manifestantes y las fuerzas del orden.
El cuarto gran pulso ciudadano que la intersindical ha lanzado en dos meses a la ley encarnada por la ministra de Trabajo, Myriam El Khomri, buscaba incrementar la presión para que se retire un texto que comenzará a ser debatido en el Parlamento el martes.
La reforma, según los siete sindicatos convocantes, “contiene grandes peligros para el mundo laboral”, y ha provocado igualmente malestar en la patronal francesa Medef, que ha amenazado con romper las negociaciones con los agentes sociales si no se modifica.
La movilización de ayer, pese a la espectacularidad de las imágenes de los enfrentamientos, fue menor que en anteriores convocatorias. Solo en París, según la prefectura de Policía de la capital, entre 14.000 y 15.000 se echaron a las calles, una cifra que los sindicatos elevaron a 60.000. (EFE)