La Fiscalía brasileña ha imputado a João Santana, el publicista que ideó las campañas electorales del expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva y de la actual mandataria, Dilma Rousseff, ambos del Partido de los Trabajadores (PT), por corrupción dentro del caso Petrobras. En la misma denuncia, hecha pública ayer, los investigadores acusan también de corrupción a otro hombre histórico del PT, el extesorero João Vaccari Neto.
Los investigadores de la operación Lava Jato (Lavacoches), la mayor investigación sobre corrupción de la historia de Brasil, acusan a João Santana y su esposa y socia, Mónica Moura, de recibir dinero desviado de la petrolera estatal Petrobras a través de una red de empresas en el exterior. Parte de esos fondos, según la Policía Federal brasileña, venían de la constructora Odebrecht, envuelta en la trama corrupta que desangró millones a la estatal Petrobras.
En marzo, los investigadores revelaron que la compañía contaba con un departamento específicamente dedicado a sobornos, responsable de pagar a cambio de conseguir ventajas en contratos, y que contaba hasta con un sistema electrónico propio. Ayer han dado una cifra aproximada de cuánto dinero dedicó la empresa a estos pagos irregulares: al menos 66 millones de reales para unas 25 o 30 personas.