Semana conflictiva



Las Personas con discapacidad se refugiaron donde pudieron ante la represión policial.

En un ambiente de alta tensión y violencia creciente, con cinco detenidos, periodistas agredidos y acusaciones oficialistas de la existencia de infiltrados, se vivió durante esta semana de movilizaciones de las personas ocn discapacidad que piden un bono de 500 bolivianos.

La Asociación de Periodistas de La Paz (APLP) denunció las agresiones y espionaje que están sufriendo en el último tiempo los periodistas de parte de la Policía y agentes del Ministerio de Gobierno.

A través de un comunicado, la APLP repudió la detención por media hora del periodista del periódico El Deber, Jesús Alanoca, el pasado miércoles, cuando filmaba, la gasificación en inmediaciones de plaza Murillo.

El pronunciamiento también se hizo al Fotoperiodista Álvaro Valero del Periódico Página Siete, quien fue agredido innecesariamente por un funcionario público, mientras realizaba la cobertura del conflicto de personas discapacitadas.

La APLP estará atenta y convoca a las autoridades pertinentes a garantizar, tanto a la prensa nacional como internacional, el ejercicio de su trabajo de manera segura.

Disturbios

Los discapacitados intentaron nuevamente ingresar a la plaza Murillo y se produjeron enfrentamientos con la Policía, que esta vez no usó agentes químicos.

Los discapacitados quemaron cartones, que lanzaron a los policías por encima de las rejas que colocaron éstos en todos los ingresos a la plaza Murillo.

Las personas con discapacidad intentaron derribar las rejas jalándolas con cuerdas, pero no lograron su cometido. Cinco personas fueron detenidas este viernes, acusadas de instigación a la violencia.

 
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