En el Altiplano
El fenómeno climático de La Niña, conocido también como “El Viejo” o “El Anti-niño”, trae condiciones contrarias al fenómeno de El Niño y suele ir acompañado del descenso de las temperaturas, lo que provoca fuertes sequías y heladas, sobre todo en las zonas altiplánicas, informó el ambientalista Jorge Oblitas.
Indicó que La Niña se desarrolla cuando la fase positiva de la oscilación del Sur alcanza niveles significativos, fenómeno que puede prolongarse por varios meses, como sucedió en 1973, 1988 y 1998. “Se caracteriza por presentar condiciones opuestas a las que caracterizan a El Niño”, explicó el experto.
Anotó, asimismo, que este fenómeno provoca vientos, que se van intensificando, poco a poco, lo que desarrolla una nubosidad y un ambiente seco en las regiones afectadas.
Este fenómeno apareció por primera vez a finales de 1989. Se divide en cuatro fases. Con La Niña concluye los trastornos climáticos de El Niño y sus repercusiones en el Altiplano.
El fenómeno de La Niña, presenta en su primera fase el fortalecimiento de los vientos alisios, que se encuentran en la zona de convergencia intertropical, así como un desplazamiento más temprano de ésta hacia el norte de sus posiciones habituales.
La segunda evidencia el aumento de los vientos fríos, la tercera ocasiona falta de lluvias y la cuarta presenta un comportamiento tranquilo y sin vientos, ya que parece que todo ha regresado a su estado normal.
DURACIÓN E INTENSIDAD
El ambientalista expuso que La Niña puede durar de 9 meses a 3 años; según su intensidad, se clasifica en débil, moderada y fuerte. Es más fuerte mientras menor es su duración. Su mayor impacto en las condiciones meteorológicas se observa en los primeros 6 meses de vida del fenómeno.
Por lo general comienza después de El Niño, en su etapa final, y alcanza su intensidad máxima a medio año. “Este fenómeno se presenta con menos frecuencia que El Niño y por un periodo de 3 a 7 años”, dijo.
MUNICIPIOS AFECTADOS
Oblitas refirió, asimismo, que Papel Pampa, Tiwanaku, Caquiaviri, Guaqui, Sica Sica, Ayo Ayo, Jesús de Machaca y Ulla Ulla, hasta el momento, son los municipios más golpeados por el fenómeno de La Niña.
Señaló que las sequias y las fuertes heladas han afectado sobre todo a la agricultura y a la cría de ovejas, llamas y vicuñas, ya que éstas no tienen forraje, porque los pastizales se han quemado con los descensos de temperaturas, mostrando en la madrugada su dureza para ser comestibles.
Por otro lado, el Alcalde de Jesús de Machaca, Fidel Ramírez Mamani, dijo que las heladas afectaron al municipio de Ulla Ulla.
Expresó su gran preocupación, por lo que solicita ayuda al Departamento de La Paz, para que los damnificados puedan reponer sus pérdidas.
Dijo que entre enero y marzo se presentaron los momentos más críticos en torno a las sequias, pero ahora las heladas están castigando fuertemente a esta población.
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