En el Teatro Municipal
Los Awatiñas vuelven al Teatro Municipal “Alberto Saavedra Pérez,
después de tres años de ausencia, para celebrar su 42 aniversario de vida artística.
Las presentaciones se realizarán durante tres días, el jueves 12, viernes 13 y sábado 14 de mayo, en funciones de tanda (horas 19:30).
Mario Conde, director del grupo, anunció que los conciertos estarán divididos en tres partes.
“En la primera parte, interpretaremos música tradicional de Bolivia, música aymara, que nos caracteriza en cada una de nuestras presentaciones en el mundo, esa música que viene de tiempos ancestrales”, adelantó.
En la segunda parte, la agrupación pondrá a consideración del público temas exclusivos de su reciente trabajo musical, denominado “Jichhapi Jichhanexa” (Ahora será diferente). Como invitados estarán los integrantes del Ballet Sendas Bolivianas, quienes expondrán la riqueza de los bailes tradicionales, como los caporales y los tobas.
“Inmediatamente y sin pausa, ingresaremos a la tercera parte que la denominamos “Reencuentro de amistad fraternal”, donde podremos cantar, recordar y disfrutar con el público todos nuestros temas que nos dieron grandes satisfacciones en el ámbito musical boliviano, como la cullawa “Desde lejos”, “Kullaquita” (Hermanita), “Mayata tunkaru” (Del uno al diez), Guerrero Aymara, Awatiñas de Pelo Largo y Urphila (Palomita)”, expresó el músico.
“En nuestra actividad inmediata tenemos proyectado este año viajes artísticos a países hermanos como Argentina, Colombia, Chile y Ecuador, entre otros. Como proyectos mediatos, estamos trabajando en una nueva grabación para la disquera que nos acogió siempre (Discolandia). Esta grabación tendrá muchas sorpresas que a su debido tiempo informaremos”, dijo Conde.
Las entradas ya están a la venta en la agencia Discolandia de El Prado. El costo es Platea Bs 50, Anfiteatro Bs. 30 y Galería Bs. 20. Para mayor información llamar al celular 77239372.
ALGO DE SU HISTORIA
El debut oficial de Awatiñas fue el 15 de mayo de 1974, año en el que obtiene el segundo lugar en el XI Festival Lauro de la Canción Boliviana en Cochabamba.
Sus creadores son los hermanos Mario y Miguel Conde, quienes investigan y difunden la cultura aymara y sus costumbres en el vibrante pentagrama de sus instrumentos.
A partir de entonces, el grupo comienza sus giras artísticas por el mundo, llevando consigo lo místico y lo sagrado, dando originalidad a un estilo propio, entre lo criollo y autóctono.
Años más tarde, Los Awatiñas obtienen la aceptación rotunda del público en las giras que realiza por Europa, Estados Unidos y Sudamérica, donde demostró su valía, llevando consigo su música de auténtico folclore. Todos estos logros se tradujeron en varias producciones discográficas.
Awatiñas resume su misión bajo el término aymara “Awatkipasipxañanakasataki”, cuyo significado es Ser vigilante, conservando de esta manera su integridad y la preservación de valores de sus antepasados para transmitir a las nuevas generaciones la cultura aymara, quechua y tupi guaraní.
A partir de 1986, la agrupación complementa sus actividades artísticas con su trabajo social en los campos de la salud y educación.
En coordinación con la Organización Socorro Popular de Francia, los Awatiñas donaron colegios y escuelas en la zona de Pampahasi y en las Kiswaras para más de 1.000 alumnos. De igual manera, entregaron al gobierno boliviano cuatro toneladas y media de medicamentos, logrando desparasitar a 1.600.000 niños en toda Bolivia.