El gobernador del estado Miranda, junto a dos docenas de personas, intentó distraer un piquete de uniformados para continuar la marcha, pero fue detenido y forcejeó con algunos de ellos hasta que recibió la descarga de gas en la cara mientras otros agentes lanzaban bombas lacrimógenas al aire.
“A Capriles le echaron gas pimienta en los ojos, lo enceguecieron y hubo que evacuarlo rápidamente”, informó el presidente de la Asamblea Nacional (parlamento), el también opositor Henry Ramos Allup.
“Están disparando perdigones, lanzando lacrimógenas y nosotros no queremos ni un solo herido porque la sangre de un venezolano vale demasiado”, agregó Ramos Allup, en un video difundido por Twitter poco después del incidente.
Capriles fue retirado para que recibiera atención médica, pues tenía síntomas de irritación en los ojos y la piel, y poco después informó por Twitter que estaba repuesto.
“Me encuentro bien, los venezolanos queremos revocatorio y cambio”, escribió el gobernador en alusión al referendo que la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) está impulsando con el objeto de poner fin anticipado al mandato del presidente Nicolás Maduro.