Brasilia.- El Senado de Brasil definirá en los próximos días el calendario del proceso contra la presidenta Dilma Rousseff, suspendida por 180 días y sustituida por Michel Temer, contra quien ayer había pequeños focos de resistencia en las calles.
Pese a que en Brasil se temía que la decisión de abrir un juicio que puede acabar definitivamente con el mandato de Rousseff fuera seguida de una gran agitación popular, hasta ahora los grupos que han protestado contra el juicio han sido minúsculos.
Ayer, una manifestación convocada en favor de Rousseff no reunió en Brasilia más que unas 200 o 300 personas, que protestaron en forma pacífica frente a las puertas del Palacio presidencial de Planalto, ocupado desde el pasado jueves por Temer. (EFE)