• Según declaraciones de algunos vecinos, en varias zonas de la ciudad el agua llega solamente una o dos veces por semana con baja presión y en horas de la madrugada
Cochabamba, (EL DIARIO).- La falta de agua y sequía extrema castiga a varias regiones de Cochabamba. La titular de la Secretaría de los Derechos de la Madre Tierra, Soledad Delgadillo, informó que se trabaja en un plan de emergencia para afrontar los efectos del fenómeno de El Niño que se sienten con mayor intensidad.
“Ha sido un año seco por el fenómeno de El Niño, en el caso de Cochabamba no ha llovido como en gestiones pasadas”, señaló.
Según declaraciones de Delgadillo, se trabaja en un plan de emergencia para poder paliar los efectos de la falta del líquido elemento que cada mes se siente con mayor intensidad en la región.
“Los municipios tienen que presentar proyectos, nosotros como Gobernación apoyaremos con la ayuda necesaria”, indicó.
Según datos de la Unidad de Gestión de Riesgos (UGR) de la Gobernación, 15 de los 47 municipios de Cochabamba presentaron sus declaratorias de emergencia por la falta de agua. El Cono Sur, los valles alto, bajo y central son las zonas más afectadas donde no hay agua para riego ni saciar la sed del ganado.
“En Omereque, Pasorapa, Mizque, la sequía es recurrente, los ríos se han secado, sabemos que el ganado está en riesgo”, confirmó.
CERCADO
Pero la situación, poco o nada es diferente en la ciudad de Cochabamba donde desde hace varias semanas el Servicio Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (Semapa) aplica un plan de racionamiento debido a que las represas de Wara Wara y Escalerani presentan un nivel por debajo del 40%.
“Estamos haciendo una redistribución del agua en la ciudad, donde recibían tres horas ahora recibirán dos”, explicó el gerente de la empresa, Gamal Serhan.
Según declaraciones de algunos vecinos, en varias zonas de la ciudad el agua llega solamente una o dos veces por semana con baja presión y en horas de la madrugada.
“No están dando agua y lo mismo estamos pagando, pueden constatar en los recibos de Semapa”, denunció Orlando Rojas, vecino de Villa Ingavi.
La mayoría de la población, que no cuenta con depósitos de agua, recurre a los baldes, turriles, bañadores y todo recipiente que encuentra para acumular el líquido elemento que resulta indispensable para el consumo humano, la higiene personal y limpieza de las viviendas.
DATOS
- En zonas alejadas, optan por comprar 200 litros que equivalen a un turril en diez bolivianos lo que dura entre tres a cinco días.
Mientras que en la zona sud, la Alcaldía de Cercado determinó perforar pozos de agua para dotar del líquido elemento a la población.
La falta de agua, también se hace evidente en la represa de la Angostura que desde el mes pasado se encuentra cerrada debido a que el nivel del agua es mínimo.
La laguna de Alalay también disminuyó su caudal en un 50%, según confirmó el director de Medio Ambiente del municipio, Elvis Gutiérrez.
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