El Museo de San Francisco y la Décima Larga Noche de Museos

Son 476 años de servicio y entrega de la Comunidad Franciscana en el valle de Chuquiago, esa labor se refleja hoy en el emblema de la paceñidad en que se ha convertido en Templo y el Convento de San Francisco de la ciudad de La Paz, donde hoy se encuentra instalado el Centro Cultural Museo de San Francisco, cuyo diseño museístico y museográfico recupera los principales espacios con la doble solemne misión, por un lado religiosa de acrecentar la fe cristiana, y la otra, de preservar uno de los más importantes monumentos de la cultura e historia indoamericana o latinoamericana, muestra de la pujanza de los habitantes de esta hermosa metrópoli.

Hace 10 años que el Museo de San Francisco, está dirigido de forma autogestionario, por el Dr. José Luis Rios Cam-beses, sin contar con la ayuda de las autoridades del gobier-no central ni regional.

El museo funciona desde los años 1940; y seguiremos apoyando a preservar nuestro patrimonio cultural y religioso que este año gratuitamente recibió en todo ese tiempo a 400.000 visitantes de todos los estratos sociales. Treinta mil durante el World Press Foto – Photo, y en la noche de los museos a 30.000 personas ofertando aspectos culturales como exposiciones de pinturas de enorme valor, música, danza moderna, nacional y latinoamericana, donde estuvo presente el Ballet – Danza moderna de la UMSA, la Filarmónica de la ciudad de El Alto, una exposición sobre la Puerta del Sol y un grupo de música barroca (cuarteto), además de Cuenta Cuentos.

Se dispuso alrededor de 200 guías turísticos pasantes en diferentes turnos, para guiar a todos los visitantes, siendo así el Museo de San Francisco, el mayor exponente de la cultura paceña. La belleza del Templo de San Francisco es singular por lo que en-cierra entre sus bóvedas y capiteles.

La hermosa Basílica de San Francisco se yergue ahora frente a la moderna ciudad, mostrando encanto y señorío, como una plegaria del paceño que pide a San Francisco de Asís “paz y bienestar” para el pueblo boliviano.