Un cártel de veras

Para este lunes 30 de mayo, la cadena Telesur anunciaba multitudinarias marchas de ciudadanos bolivianos en La Paz y Santa Cruz, en protesta contra la Ley Transnacional Contra las Drogas aprobada quince días antes por el parlamento de Estados Unidos.

En lugar de esas marchas, lo que ocurrió fue un bloqueo nacional de carreteras por parte del transporte pesado, como protesta por la también pesada carga tributaria que llevan sobre sus espaldas, como todos los bolivianos dedicados a actividades legales.

De la protesta contra la ley de Estados Unidos, que abre la posibilidad de llevar extraditados a los cocaleros que proveen la materia prima al narcotráfico, ni una sola noticia, lo que tampoco hay que tomar como el visto bueno de los bolivianos a aquella ley, se supone.

Lo que también se vio fue la protesta de los cocanis, o vendedores de coca, contra la decisión del gobierno boliviano de autorizar a los productores de coca a vender la hoja del productor al consumidor en todo el país, con lo que 35.000 nuevos vendedores de la hoja sagrada se sumarían a los miles ya existentes. Una competencia desleal, un monopolio cocalero, un atropello, decían los cocanis.

La misma cadena informativa del socialismo del Siglo XXI dijo que el gobierno de Mauricio Macri estaba autorizando la instalación de dos bases militares norteamericanas en territorio argentino, pero ningún medio de la región se había enterado del tema, y menos el gobierno argentino, ni el de Estados Unidos.

Junto con Telesur, algunos medios de la región están haciendo una guerra sucia contra los gobiernos que desplazaron a los que habían sido bendecidos y financiados por el finado Hugo Chávez y por otros recursos.

Es una verdadera cadena, o quien sabe cártel, que se ha propuesto difundir estas “noticias” contra los gobiernos de Argentina y Brasil, además de favorecer a los gobiernos del grupo chavista que quedaron en pie, algunos en uno solo.

El vicepresidente boliviano se benefició de esa cadena cuando dio una charla en Buenos Aires, porque “Página 12”, y los medios que compró el gobierno de los esposos Kirchner, difundieron alabanzas a la “magistral” charla, que se dio en la Fundación Abdala, relacionada con grupos violentos que fatigan el medio oriente y aterrorizan al mundo.

Este sí es un cártel peligroso.

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