Acontecimiento cultural en La Paz

Un histórico acontecimiento cultural se está registrando en La Paz y nada menos que al aire libre, como para que todo transeúnte del paseo de El Prado tenga el privilegio de conocer copias de una selección muy apropiada del arte pictórico que alberga el prestigioso museo del Prado, de Madrid, la capital de España.

Los bolivianos amantes de la cultura y, en particular, de la pintura, tienen muy pocas oportunidades de disfrutar, de enriquecer su espíritu, de viajar al exterior para sentir ese placer. En este caso particular a España, para tener frente a sus ojos las bellezas que pueden crear los seres escogidos con los pinceles, las pinturas, los colores y las formas.

Algo así como un milagro, el regalo a los habitantes paceños nos está haciendo el Centro Cultural de España en La Paz, con el apoyo de la Alcaldía. La proficua labor de este organismo, por mantener viva parte de nuestros orígenes ancestrales, es digna de todo reconocimiento y gratitud.

Algunos bolivianos, desorientados por ciertas prédicas oscurantistas, tratan de abominar o por lo menos subestimar el hecho de que España hubiera colonizado el inmenso continente latinoamericano. No toman en cuenta que cada época de la historia humana tiene sus características, entre aciertos y obviamente errores, porque ninguna sociedad, del pasado y del presente, es perfecta.

Después del célebre descubrimiento de América por Cristóbal Colón, se abrió otro cauce para la emigración europea a tierras desconocidas, para sentar derechos de propiedad, ciertamente, sea en la medida que fuere propicia. Pero, a la vez, transportar a estas tierras virtudes y debilidades, que son propias de los seres humanos de todos los tiempos.

Que hubo explotación de las riquezas y del trabajo de los nativos nadie puede negarlo, pero esto mismo realizaban otros países del viejo continente en tierras a las que, igualmente, tuvieron acceso en la inmensidad planetaria. Tal es la cuenta que tienen históricamente los colonizadores, pero, al mismo tiempo, aportaron con lo suyo, podrá decirse mucho de malo, pero en puridad de verdad, también bastante de lo bueno. En última instancia, con su cultura, adelantaron quizás en milenios el reloj de la historia de los pueblos conquistados.

Estas líneas no pretenden dilucidar los contrapuntos de la historia, sino remontarse brevemente a esas épocas y ahora constatar que los conquistados somos iguales que los conquistadores. Y esto podemos experimentar con los encantamientos de disfrutar de una misma cultura y similares capacidades para conciliar nuestros espíritus, a través del arte pictórico, que es uno de los mayores tributos que ofrece la cultura.

En este orden, España atesoró lo suyo, pero también cultiva el aprecio por los de otros. De manera que, a manera de realizar un paseo por nuestro querido espacio que es El Prado, podemos encontrarnos con una selección de probablemente lo mejor que posee en sus ámbitos el famoso museo del Prado de Madrid.

Pues, las obras que son expuestas en El Prado nuestro, a la luz de este maravilloso cielo azul que tiene La Paz, no sólo son creaciones de pintores españoles, sino también de franceses, italianos y hasta de flamencos, que tienen una mayor dispersión geográfica que de un solo país.

Este domingo y dos más en que todavía estarán expuestas en La Paz las pinturas del museo del Prado, se presta para que los papás y mamás lleven a sus hijos, de todas las edades que tengan, para que aprendan a apreciar las bellezas que pueden deparar las artes plásticas.

Se puede tener a la vista portentosas expresiones del arte pictórico, que constituyen verdaderos regalos para solazar el espíritu humano. Si acaso no se experimentó aún este gozo indescriptible, hágalo ahora, no se arrepentirá. Aunque no se proponga racionalmente, la fuerza del alma es superior a la de la mente y hasta del propio corazón.