Comunidad de Alcohólicos Anónimos convoca a cambiar una historia de vida

El pasado 10 de junio a nivel mundial, se celebró el Día Internacional de Alcohólicos Anónimos, fecha en la que sus miembros invitan a la sociedad dedicada al consumo de alcohol a cambiar historias de vida en bien de las familias afectadas.

Alcohólicos Anónimos (AA), fue creado el 10 de junio de 1935 por William Griffith y Bob Smith en Akron, Ohio, Estados Unidos. La comunidad funciona en países de todo el mundo, y las personas que han podido superar el problema del alcoholismo, celebran poder decir un “día más sin consumir alcohol”.

En contacto con EL DIARIO, Hernán, que encontró la comunidad hace 18 años atrás, contó la ingrata experiencia por la que pasó, como alcohólico, cuya hecho provocó la destrucción de su hogar, y de su en entorno familiar.

Sin embargo, hoy dejando atrás el pasado, orgulloso y con una sonrisa inspiradora, comenta que Alcohólicos Anónimos es el café caliente que se encuentra en la reunión de cada noche; es la ternura, el cariño, el respeto, el abrazo franco y sincero de sus miembros al concluir una reunión.

AA es atender un llamado telefónico cada vez que una persona lo necesita, es una introducción a la amistad, es elevar una oración en silencio. AA es ese obrero, esa ama de casa, ese hombre de negocios, ese arenero, ese albañil, esa oficinista, que está en las garras del alcohol.

“…..Alcohólicos Anónimos son servidores, que sin tener un estatus, una jerarquía, simplemente sirven extendiendo una mano a la persona que la necesita (…); AA es una felicidad en circunstancias adversas, difíciles, tortuosas, nosotros tenemos tolerancia ante el intolerante”, dijo.

Expresó que cada vez que una persona cumple un año, de haber dejado el alcohol, recibe una moneda; AA es una tarjeta arrugada con la oración de la serenidad que se guarda en una billetera, es una pausa de meditación, es la visita a un hospital, a una cárcel, con la finalidad de llevar el mensaje que impulsa la comunidad, eliminando el ego, y demostrando al mundo que sí se puede.

El representante de la comunidad de AA, de la Cañada Strongest y Otero de la Vega, sostuvo que alcoholismo actualmente es una de las adicciones más presentes dentro de las sociedades en el mundo y es causa de problemas familiares, legales, psicológicos, entre otros muchos.

El programa se basa en el seguimiento de Doce Pasos, diseñados para que el alcohólico controle su problema, ya que todos los miembros tienen la misma condición, se supone que generan una comprensión especial entre ellos; uno sabe lo que siente el otro, así que aquello de decir “nadie me comprende”, debe quedar superado en primera instancia.

POTENCIALES

Los miembros de la comunidad en contacto con EL DIARIO relataron que existe el alcohólico social, que es tranquilo, no excede en la bebida, toma unas cuantas copas y se despide de la fiesta o reunión; pero hay personas que pasan de este estado (tranquilo) a ser problemáticas, cuya actitud muestra signos de problemas.

Pero también está el crónico, la etapa terminal del alcohólico, en ésta ya no hay posibilidades de recuperación, y sólo se espera lo peor.

Recomiendan controlar la injerencia de bebidas, para que el proceso no sea progresivo, y se llegue a consumir en exageración.

Reconocen que son discriminados, pero comprenden a la población, pero también les piden tolerancia.