Cómo calentarnos sin fogatas

La tradición de encender fogatas en la noche de San Juan y bailar alrededor de éstas se cumple en todo nuestro territorio, aunque las autoridades comunales lo prohíben en las ciudades, defendiendo el medio ambiente ante los efectos nocivos de la quema para toda la población.

Sin embargo de todo lo enunciado, de la gelidez de la famosa noche, los citadinos comprobamos que nuestro hábitat amanece contaminado por obra y gracia de las fogatas que calentaron a nuestra población rural que predica la adoración a la Pachamama.

Como no tengo a quién quejarme por esa injusticia, tuve que recurrir a mi corresponsal en el Palacio Real de la plaza Murillo para preguntarle si en ese mágico caserón había escuchado de alguna fórmula mágica que nos permitiera a los ciudadanos comunes y silvestre calentarnos esta noche sin encender fogata alguna. La perspicaz cholita no se hizo de rogar y me aseguró que nos calentaríamos al saber que nuestro Presidente vitalicio alista maletas y muletas, para viajar a Alemania a recoger unas piezas arqueológicas que fueron llevadas a ese país europeo y que serían devueltas a Bolivia.

Al conocer esa decisión presidencial sentí que me calentaba, sucediéndole lo mismo a mi comadritay, quien me preguntó si no teníamos representantes diplomáticos en aquel país europeo capaces de cumplir con esa tarea tan sencilla.

“Ya me estoy calentando, pero hay muchos motivos más para calentarnos sin necesidad de una fogata, dijo Macacha tomándome de las manos para transmitirme calor”.

Otro asunto que debería calentarnos es la posición hipócrita de algunos dirigentes de la Central Obrera Boliviana que dicen estar contra el gobierno de Evito, mientras gozan de las fruiciones del Poder, como ser viáticos de dirigentes, sitiales en la Asamblea Legislativa, y burócratas que manejan la Caja Nacional de Salud.

A esta altura de nuestra conversación, Macacha me manifestó que ya estaba caliente y segura de haber vencido los rigores de la noche más fría del año sin haber contravenido las disposiciones municipales.

Al sentir que yo también me había calentado al escuchar los motivos de la cholita cochabambina nacida en Quillacollo, me adherí a sus conclusiones y hoy puedo decir a mis lectores que son muchos los motivos para estar calientes en la noche más fría del año, como la invocación a las deidades aymaras en labios del marxista, comunista y stalinista licenciado Álvaro García Linera.

¡Ufa que hace calor!!!